El 27-F: uno de los terremotos más violentos de la historia de la humanidad
El 27 se febrero se cumple un año más de uno de los terremotos más violentos registrados en la historia moderna de Chile y de la humanidad: el 27-F, ocurrido en 2010. Trece años después repasamos la historia.
Los habitantes de Chile están acostumbrados a sentir, casi a diario, las oscilaciones provenientes del interior de la Tierra, al fin y al cabo, este es uno de los países del mundo que presenta los índices más altos de sismos, habiendo sido ya sacudido por algunos de los los más grandes jamás registrados en la historia de la Humanidad.
El 27 de febrero de 2010, Chile sufrió lo que se convertiría en el segundo terremoto más fuerte de su historia moderna y el séptimo más fuerte registrado en todo el mundo. El terremoto dejó un saldo de 525 muertos, cientos de heridos y más de medio centenar de desaparecidos, además de una vasta estela de destrucción.
A las 03:34 h local, el país fue sacudido por un violento seísmo de magnitud 8,8 Mw, con epicentro en el mar, a 35 km de profundidad, a 8 km al oeste de Cobquecura, Región del Ñuble, según el Servicio Geológico de los Estados Unidos.
Tras el terremoto, un fuerte tsunami afectó la costa de Chile, destruyendo o devastando varias ciudades y parte del territorio insular. El archipiélago de Juan Fernández, por ejemplo, a pesar de no haber sufrido daños por el terremoto, fue golpeado por el tsunami que arrasó con su única comunidad, San Juan Bautista.
Estos fenómenos se tradujeron en grandes pérdidas humanas, materiales y de infraestructura crítica, así como en el patrimonio económico y social del país. Se estima que este evento causó daños valorados en treinta mil millones de dólares.
Para que tengamos una dimensión de un terremoto de tal magnitud, un estudio de la agencia espacial estadounidense, NASA, realizado en la época, demostró que el terremoto pudo haber inclinado el eje de la Tierra en 1, 6 microsegundos (unos 8 centímetros).
El 27-F, como se le conoce en Chile, fue de 700 a 800 veces más fuerte que el terremoto ocurrido en el mismo año en Haití, en enero, de 7,0 Mw y que se estima causó muerte a más de 230 mil personas.
Chile: un país de terremotos
Chile es uno de los países del mundo donde más tiembla la tierra. Con una extensión territorial de 756.945 km², el país tiene una población más de 19 millones de personas. Su territorio se encuentra en una zona de inestabilidad tectónica, un área de convergencia entre dos placas tectónicas: las placas de Nazca y Sudamericana, las cuales se mueven una hacia la otra.
Esta circunstancia desencadena terremotos muy frecuentes, ya que el país se encuentra en el borde de la placa sudamericana. Según el Instituto de Geofísica de la Universidad de Chile, el encuentro de estas dos placas produce un terremoto de gran magnitud cada diez años, un promedio de diez pequeños temblores por día y unos 3.500 movimientos sísmicos por año.
En el siglo XIX se produjeron devastadores terremotos en Chile: en 1822 en Valparaíso; en 1835 en Concepción, con un maremoto; en 1854 y 1859 en Copiapó; y en agosto de 1868 y mayo de 1877, acompañado de maremotos en Arica.
El 24 de enero de 1939, un terremoto dejó 30.000 muertos entre las regiones del Maule al Biobío, y el 29 de abril de 1949 otro terremoto provocó 33 muertos en la Región del Maule. Entre el 21 y el 26 de mayo de 1960, una serie de sismos de intensidad superior a 7 azotaron el sur del país, provocando entre 5.000 y 6.000 muertos.
El 22 de mayo de 1960 ocurrió en Valdivia el terremoto más fuerte jamás registrado en la historia de la humanidad. Un terremoto de 9,5 Mw, que generó un tsunami con olas de hasta 25 metros de altura y que llegó hasta Hawai, causó miles de víctimas en Chile, y decenas de muertos también en zonas del globo ubicadas a muchos miles de kilómetros de la epicentro.