Arqueólogos desentierran una decena de cocodrilos momificados en Egipto
Los cocodrilos fueron descubiertos en una tumba intacta, en el sur de Egipto. Los arqueólogos piensan que pude tratarse de un sacrificio ofrecido para el dios egipcio Sobek.
Diez cocodrilos momificados fueron encontrados en una tumba intacta en Qubbat al-Hawā, cerca de la ciudad de Asuán, en el sur de Egipto, en el año 2019, por unos investigadores de la Universidad de Jaén.
La colección de los cocodrilos momificados fue catalogada como un "hallazgo extraordinario". En total, 5 cráneos y 5 esqueletos casi completos fueron descubiertos, junto a evidencias de un sacrificio ritual. Los cocodrilos fueron encontrados en un local, con otras seis tumbas adyacentes.
En un nuevo estudio publicado en la revista PLOS One, los arqueólogos dicen se dice que las momias son evidencia de rituales de sacrificio, probablemente hechos al dios egipcio Sobek, el dios del agua y la fertilidad.
Según Bea Cupere, autora principal del estudio y arqueozoóloga del Royal Belgian Institute of Natural Sciences, se conocen más de 20 sitios de entierro con momias de cocodrilos en Egipto. También, afirma que encontrar 10 momias de cocodrilos bien conservadas juntas en una tumba intacta es algo "extremademente extraordinario".
Un hallazgo impresionante
Dentro de la tumba, los investigadores encontraron pedazos de lino, hojas de palma y cuerdas, lo que indica que los especímenes de cocodrilo habían sido envueltos antes de ser enterrados. Eso sí, las vendas podrían estar podridas desde hace mucho tiempo.
Las momias de estos animales podrían ser únicas ya que habían sido momificados sin resina ni evisceración de los restos, lo que significa que fueron preparados de una manera diferente a cualquier reptil o animal momificado. El cocodrilo más grande medía 3,5 metros de largo, mientras que el más pequeño alcanzaba los 1,6 metros. Según los autores, los cocodrilos pertenecían a dos especies: el cocodrilo del Nilo y el cocodrilo de África Occidental.
Sorprendentemente, tres de los esqueletos de cocodrilo estaban casi completos, mientras que a los otros les faltaban varias partes. Los investigadores creen que dichas partes se perdieron cuando los especímenes fueron trasladados.
"Los cocodrilos habrían sido enterrados en otro lugar, posiblemente en algún pozo de arena", dijo De Cupere. "Esto permitió que los animales se secaran de manera natural. Luego, los restos fueron desenterrados, envueltos y trasladados a la tumba en Qubbat al-Hawā", agregó.
Crocodile mummification
Se cree que los cocodrilos habrían sido utilizados durante los rituales del dios egipcio Sobek, que generalmente se representa con una cabeza de cocodrilo. El culto a los cocodrilos era común en Kom Ombo según los arqueólogos, un sitio a solo 50 kilómetros de Asuán, donde se encontraron las momias.
No se encontraron heridas en los especímenes, lo que sugiere que los antiguos egipcios probablemente los atraparon en redes, antes de dejarlos morir, asfixiarse o sobrecalentarse al Sol.
Uno de los cocodrilos, el mejor conservado, tenía piedras de su estómago. Estas piedras, conocidas como gastrolitos, ayudan a los cocodrilos a mantenerse en equilibrio en el agua. La presencia de estas indica que el animal no se abrió para extraerle los intestinos. Los autores creen que las momias datan de antes del 304 a. C., pero pretenden confirmarlo lo antes posible con pruebas de radiocarbono y ADN.