Calidad del aire en Santiago: 2024 sorprende como el tercer año con menos episodios críticos de los registros
Tras el término del periodo de Gestión de Episodios Críticos (GEC) las conclusiones dejaron un trago amargo con respecto al año anterior. A pesar de esto, el 2024 se destacó de manera positiva en las estadísticas históricas de calidad del aire en la capital de Chile.
La calidad del aire en la Región Metropolitana de Santiago de Chile experimentó hasta el cierre de agosto un deterioro significativo con respecto a las cifras del año anterior.
Hasta la fecha, se registraron 24 episodios críticos de material particulado 2,5 (MP2,5), que superaron los 17 ocurridos en todo 2023, de acuerdo con los datos entregados en el balance anual GEC del Ministerio de Medio Ambiente (MMA).
Asimismo, para el MP2,5 el número de horas con concentraciones en episodio fue de 322, dejando un total de 5 preemergencias y 19 alertas, y superando las 243 horas en episodio del año 2023.
Las causas
A pesar de las abundantes lluvias registradas, las cuales contribuyen a mejorar la ventilación, las condiciones postfrontales aportaron temperaturas bajas y estabilidad atmosférica.
Si comparamos el periodo mayo-agosto, el 2024 nos dejo un total de 20 días bajo la condición de olas de frío en la estación meteorológica de Quinta Normal, superando ampliamente al año anterior donde se tiene registros de 8 días.
El periodo GEC 2024 también presentó temperaturas mínimas inferiores al 2023, si contrastamos los meses de julio en ambos años la temperatura mínima media para el 2024 fue de 2,1 °C contra los 5,3 °C del 2023.
Esto supone un mayor uso de calefacción que, combinado con la estabilidad atmosférica debido al posicionamiento de anticiclones migratorios durante esta época, impidió el ascenso vertical y la dispersión de los contaminantes.
El factor geográfico de Santiago de Chile
Además de las diversas fuentes de contaminación –por ejemplo, el parque automotriz o la quema de biomasa–, la geografía de la ciudad no contribuye a la dispersión oportuna de los contaminantes.
Santiago se ubica en un valle rodeado de montañas. Esta circunstancia, en combinación con las condiciones meteorológicas que se presentan en el invierno, provoca que la ciudad sufra de un encierro orográfico, lo que dificulta la dispersión de los contaminantes a través de las corrientes de aire.
¿Qué medidas contempla el Plan de Prevención y Descontaminación Atmosférica en la Región Metropolitana?
Los planes de Prevención y Descontaminación son un instrumento de gestión que se basa en la implementación y la toma de decisiones especificas con la finalidad de reducir los índices de contaminación salvaguardando la salud de las personas. Este tipo de planes se adecuan a las características específicas de cada región, lo que permite tratar de mejor manera y con un mayor enfoque el problema.
En el caso de la Región Metropolitana, estas normativas están reglamentadas en el Decreto Supremo 31 del año 2016. Entre las medidas que se contemplan, según el MMA, se encuentran:
- el control de las fuentes fijas y móviles;
- la gestión de episodios críticos de contaminación;
- la regulación para el control de emisiones provenientes del uso de leña y pellet de madera;
- educación Ambiental y gestión ambiental local;
- control del levantamiento de polvo y generación de áreas verdes;
- compensación de emisiones;
- control de emisiones asociadas a las quemas agrícolas, forestales y de residuos en general.
¿Funcionan las medidas para disminuir los índices de contaminación?
De acuerdo con las cifras históricas, el 2024 resultó el tercer año con mejor calidad del aire desde que comenzó a operar el primer Plan de Prevención y Descontaminación atmosférica (PPDA) en el 2017, solo superado por el 2023 y el 2020, cuando nos encontrábamos en plena pandemia.
Además, el MP 2,5, uno de los contaminantes de invierno más dañinos, debido al tamaño que presentan sus partículas, las cuales pueden ingresar a los pulmones cuando respiramos, presentó en el año un balance histórico positivo.
Según las cifras mostradas por el informe GEC 2023, desde el 2017 en adelante las partículas de este contaminante comenzaron a disminuir y, con ello, los episodios críticos. Desde esa fecha, se puede observar una tendencia a la disminución del número de horas en episodio de emergencia, siendo el año 2023 el mejor registro observado hasta el presente.
¿Qué podemos esperar para el futuro?
Todavía resta mucho tiempo para que inicie el periodo GEC 2025, pero si se siguen perfeccionando los planes de gestión y todas las medidas enfocadas a disminuir la contaminación, podríamos esperar que la tendencia se mantenga a la baja.
No obstante, debemos tener en cuenta que no son solo las medidas lo que permite mejorar, tanto las condiciones meteorológicas, como la responsabilidad social de cada uno de nosotros son factores fundamentales para tener un espacio más limpio donde vivir.
Fuentes y referencias de la noticia:
-MMA: Aire Región Metropolitana, SINCA.
-ONU: Programa para el medio ambiente
-Dirección meteorológica de Chile: Informe mensual de temperatura, Monitoreo de olas de frío.
- Ministerio de Medio Ambiente. MMA. Informe Final para la Gestión de Episodios Críticos de Contaminación Atmosférica por Material Particulado Respirable MP10 y MP2,5 (2023).