Chao 2021: los 6 hitos meteorológicos que marcaron este año en Chile
Aguaceros y tormentas eléctricas en verano, inviernos cada vez más cálidos y menos lluviosos, marejadas, tornados, incendios, olas de calor, son parte de los fenómenos y las consecuencias que se reiteran cada vez con mayor frecuencia e intensidad.
La megasequía, que completa 13 años consecutivos, es el gran problema climatológico con el que debe lidiar Chile. De hecho, nunca en su historia, el país había padecido un periodo tan prolongado con falta de precipitaciones.
Más allá de esto, queremos resaltar los hechos meteorológicos y sus consecuencias que marcaron 2021. Para ello hemos preparado este listado con los 6 fenómenos que más sorprendieron al país durante el año viejo.
1.- Inusual aguacero de verano
Ni siquiera el invierno dejó una lluvia tan abundante en la zona central como la caída durante el 29 y 30 de enero. Santiago acumuló 40 milímetros y, de hecho, se alcanzó el récord con las precipitaciones más copiosas en 24 horas para enero desde que hay registros.
Aluviones, casas destruidas, personas damnificadas, caminos cortados, inundaciones, hogares sin energía eléctrica, dificultades en el tratamiento del agua potable y un largo etcétera fueron parte de las consecuencias que dejaron las tormentas de verano.
La llegada de un sistema frontal hasta latitudes inusuales para la estación, la posterior presencia de una baja segregada y, además, el aporte de un río atmosférico, se sumaron para dejar caer un aguacero con altas temperaturas.
2.- Granizos gigantes
El pasado fue un verano movido, de hecho, relacionado con lo anterior es que una enorme granizada afectó parte de la zona central y, especialmente, la Región del Maule ante el desarrollo de nubosidad vertical “alimentada” por la gran cantidad de humedad en el ambiente y el calor.
“Nunca había visto en la zona central del Chile granizos del tamaño de los que han caído en últimamente”, afirmó entonces Luis Salazar (65), profesional de la Dirección Meteorológica de Chile (DMC) con respecto a la dimensión de los pedriscos recibidos.
3.- Invierno súper seco y cálido
Santiago registró el invierno más cálido en 72 años con una temperatura máxima que promedió 18,5 °C, es decir, 2,5° por sobre el promedio normal para la época que es de 16 °C según la Dirección Meteorológica de Chile (DMC).
Además, fue el invierno meteorológico menos lluvioso en 23 años, alcanzado sólo 41,4 milímetros de los 205 normales para la fecha que abarca los meses de junio (22,3 mm), julio (0,6 mm) y agosto (18,5 mm).
A esto se agrega la falta de nieve con déficits superiores al 90% en la cordillera andina de la zona central.
4.- Incendios nefastos
La escasez hídrica, las altas temperaturas y los vientos se confabulan para facilitar la propagación de los incendios forestales los que, este año, alcanzaron sectores habitados. Aún las personas sufren las consecuencias de las llamas que devoraron más de 140 hogares en Castro, Chiloé, durante diciembre.
Lo anterior cerró un año que comenzó con un siniestro en enero que consumió 4.000 hectáreas de vegetación y también hogares en Quilpué, región de Valparaíso.
5.- Temporada de tornados
Los expertos ya hablan de una temporada de tornados en Chile, la cual se concreta durante el otoño. “La plaza desapareció” afirmó el alcalde de Toltén (La Araucanía) tras el paso de una tromba marina que dejó más de 50 árboles caídos e incluso provocó un incendio.
Además, hubo testimonios también de otros fenómenos similares en Tucapel (Biobío) y Chiloé (Los Lagos).
6.- Marejadas anormales
Las marejadas, calificadas como anormales por su magnitud, causaron estragos en la costa del centro-sur durante junio, por ejemplo, anegando la longa pesquera en San Antonio y Rapa Nui.
Según los datos del Centro Meteorológico Marítimo de Talcahuano, mar adentro las olas más altas alcanzaron 10 metros.
Aguaceros y tormentas eléctricas en verano; inviernos cada vez más cálidos, menos lluviosos y con poca nieve, marejadas potentes, tornados frecuentes, incendios voraces, escasez hídrica, olas de calor, en fin, son parte de los fenómenos y las consecuencias que se reiteran cada vez con mayor frecuencia e intensidad en los resúmenos meteorológicos en Chile.