Chile sostenible: ¿de qué trata la ley de plásticos de un solo uso?
Este jueves 20 se aprobó en el Congreso de Chile una nueva legislación que tiene como objetivo la reducción progresiva en la utilización de artículos plásticos de un solo uso en el país. Próximamente, se pondrá en vigor para contribuir a que Chile deje atrás la cultura de lo desechable.
El Congreso de Chile ha aprobado hace unos días atrás una Ley que prohíbe la utilización de los plásticos de un solo uso para el consumo dentro de los establecimientos de expendio de alimentos, así como establece que el servicio de entrega se hará en envases desechables de materiales biodegradables como el papel o en plásticos compostables.
Fomentar el uso de botellas retornables es otra de las obligaciones que establecerá esta Ley, cuya implementación total se prevé en un plazo de 3 años a partir de su publicación. La obligatoriedad de proporcionar al consumidor la información de los envases utilizados es otra de las disposiciones, que promueve la educación de la sociedad en el cuidado medioambiental.
Por otra parte, exigirá la certificación de los plásticos compostables que se utilicen, es decir, aquellos que son biodegradables en condiciones controladas de oxidación, para evitar que reemplacen a los plásticos provenientes de hidrocarburos que hoy contaminan nuestros océanos.
Para la promulgación de esta Ley ha sido crucial la contribución de Oceana Chile y Plastic Oceans Chile, que en 2019 publicaron un revelador informe que entre otros temas, dio a conocer que anualmente en Chile se generan 23 mil toneladas de plástico contaminante. La intensa labor de divulgación entre los legisladores chilenos de la incidencia de este material en la destrucción del planeta, así como de las legislaciones en otros países, contribuyeron a la concientización de quienes hoy aprueban una de las regulaciones más estrictas e innovadoras en esta materia a nivel mundial.
La acción coordinada del Ministerio de Medio Ambiente y las organizaciones de la sociedad civil propiciarán la implementación de programas de educación ambiental y el fomento de la industria nacional de materiales biodegradables. Una ciudadanía educada en la conservación del ambiente tendrá un rol protagónico en la fiscalización de esta regulación, en estrecha coordinación con las Municipalidades. Estas acciones harán la diferencia en un futuro no muy lejano para el hábitat de la especie humana, que hoy teme océanos más poblados por plásticos que por peces en el 2050, si no se detiene hoy el consumismo irresponsable del hombre.
Pero no ha sido la primera…
Esta Ley tiene como antecedente la normativa que entró en vigor en Chile en agosto de 2018, prohibiendo el uso de bolsas plásticas de un solo uso en los comercios. Esta norma fue la primera de su tipo en América Latina y hoy da sus frutos: más de 5.000 millones de bolsas plásticas no han terminado contaminando nuestra geografía, en los poco más de 2 años de su aplicación.
Es responsabilidad de los que hoy habitamos el Planeta legar una sociedad cada vez más responsable de sus desechos y que cree alternativas para una relación respetuosa con la naturaleza. Aún no es tarde para pensar y actuar por un futuro para todas las especies que comparten una misma casa: La Tierra.