CIIFEN señala: “El Niño inicia su fase de maduración”, ¿qué significa esto?
El pasado 09 de noviembre, el Centro Regional del Clima para el Oeste de Sudamérica publicó un nuevo boletín actualizando las condiciones de El Niño en América Latina.
El Centro Regional del Clima para el Oeste de Sudamérica (CIIFEN) ha publicado recientemente su boletín mensual respecto a los efectos climáticos relacionados con El Niño, centrándose especialmente en América Latina.
Este servicio de información ofrece a los diversos sectores involucrados en el desarrollo, la comunicación, la ciencia y la sociedad en general un resumen práctico y actualizado de diferentes fuentes de información relevantes, para estudiar los impactos climáticos asociados a El Niño/La Niña, desde un enfoque regional centrado en el Pacífico oriental. Aquí encontrarás lo más destacado.
¿Qué significa que El Niño haya entrado en fase de maduración?
El Niño entró en su fase de maduración en octubre, cuando se intensificaron las temperaturas presentándose más cálidas de lo normal en el Pacífico Central hasta 250 m bajo la superficie, y las temperaturas más frías de lo normal en el Pacífico Occidental entre 100 y 250 m de profundidad. Este contraste señala el comienzo de la fase de maduración de El Niño.
Este gradiente térmico se reflejó en la superficie del mar, donde las anomalías positivas se mantuvieron gracias a los vientos del oeste que predominaron en el Pacífico Ecuatorial y que a su vez impulsaron una onda Kelvin cálida.
Según el pronóstico del ENOS, hay un 100% de probabilidad de que El Niño continúe durante el próximo trimestre (noviembre – enero 2024) y es probable que persista al menos hasta abril de 2024.
Si traducimos esto al comportamiento de las precipitaciones, el informe indica que para el período de noviembre a enero de 2024, se espera que la lluvia sea mayor a la habitual en la zona costera de Ecuador y Perú, el sur de Brasil, Uruguay y el noreste de Argentina.
Por el contrario, se prevé que la Amazonía, algunas regiones de Colombia, Venezuela, el noreste de Brasil, la mayor parte de Bolivia y el norte de Chile tengan menos lluvia de lo normal. La temperatura del aire tendría una alta probabilidad de superar lo normal en casi todo el continente sudamericano, salvo en parte de Colombia y el centro de Chile.
Comportamiento de la temperatura superficial del mar
El Pacífico Ecuatorial experimentó temperaturas por encima de lo normal durante el mes de octubre. En comparación con septiembre de 2023, se observa que el calor persistió en las regiones occidental y central del Pacífico Ecuatorial, aunque disminuyó ligeramente en la región oriental.
Fecha | Niño 4 | Niño 3.4 | Niño 3 | Niño 1+2 |
---|---|---|---|---|
25 octubre | 1,2 | 1,5 | 2,0 | 2,5 |
01 noviembre | 1,4 | 1,8 | 2,1 | 2,2 |
Cambio de anomalía de la TSM (ºC) entre la última semana de octubre y la primera de noviembre 2023 |
Entre finales de octubre y principios de noviembre, el calor aumentó en las tres regiones Niño, excepto en la región Niño 1+2, que bajó -0,3 °C. A pesar de esta disminución, el calor sigue siendo notable en todo el Pacífico Ecuatorial, lo que indica un patrón de calentamiento persistente en la región.
Estas temperaturas anómalas son importantes de monitorear, ya que pueden tener impactos en el clima y los ecosistemas marinos de la zona, por lo que la entidad aconseja mejorar los planes de gestión a nivel institucional y comunitario, y aumentar las acciones de prevención.
Estado de las oscilaciones atmosféricas vinculadas a El Niño
Desde agosto, el Índice de Oscilación del Sur (IOS) ha mantenido valores característicos de El Niño en los últimos 30 días. Por lo general, cuando los valores negativos del IOS se mantienen por debajo de -7, favorece la presencia de El Niño. Por el contrario, cuando los valores positivos sostenidos están por encima de +7, indicaría el fortalecimiento de La Niña. Valores entre +7 y -7 indican condiciones neutras.
Respecto a la Oscilación Madden-Julian (MJO), se observó que estuvo presente entre la línea de fecha (180°) y el meridiano de Greenwich (0°), lo que fue favorable para la precipitación en algunas regiones de Sudamérica. Esta misma condición ha predominado sobre la línea de fecha a lo largo de todo el año. Al inicio de noviembre se observó una condición desfavorable para precipitación entre 120°O y 60°O.
Respecto a la anomalía de radiación saliente de onda larga (OLR), CIIFEN explicó que desde el mes de mayo ya comenzó a presentar valores negativos alrededor de la línea de fecha (180°), lo que indica condiciones favorables para que se produzca convección.