Consejos para sobrevivir al calor si no tienes aire acondicionado en casa
Aunque ya las temperaturas han subido —y bastante—, la época de más calor en Chile aún no se ha manifestado. Te contamos cómo puedes capear las altas temperaturas, incluso si no cuentas con aire acondicionado.
Un aire acondicionado puede transformarse en el sueño de consumo de muchos chilenos y chilenas que enfrentan el calor extremo en la época de verano. Sin embargo, no todos los hogares cuentan con condiciones para encarar —y costear— la adquisición, uso y manutención de un equipo con esa tecnología refrigerante.
Por esto, hemos decidido darte algunos tips para que puedas dejar tu casa mucho más agradable en esta estación del año, en donde las temperaturas máximas pueden dispararse por sobre los 35 grados en algunos sectores del país.
Cierra puertas, ventanas y cortinas
¡Espera!, no te vayas... no estamos locos. Aunque te pueda parecer una locura, hay una razón física por detrás. Sí, si abres puertas y ventanas de noche, lograrás que el calor salga de tu casa y ella se refresque. Pero si lo haces de día, el aire más fresco del interior de tu casa será intercambiado por el aire más cálido del exterior.
De hecho, también hay una razón termodinámica (que envuelve el movimiento producto de los cambios o diferencias de temperatura) en pedirte que cierres las cortinas: el Sol es la principal fuente de calor de nuestro planeta, y calienta todas las superficies donde incide, incluso el piso de tu casa, cuando la radiación solar entra y lo ilumina a través de los vidrios de las ventanas.
Cuando, por ejemplo, el piso de tu living se calienta (o una pared, un mueble, etc.), él transfiere calor al ambiente, elevando así también la temperatura del aire en el interior de tu casa.
Si evitamos que los rayos del Sol lleguen de forma directa al interior de nuestros hogares, lograremos que la temperatura se mantenga algunos grados más abajo con relación a la temperatura del exterior.
"Róbale" calor al aire
No me extrañaría si en estos momentos te estás preguntando cómo es que "le robo" calor al aire para disminuir su temperatura. Bueno, recuerda que el aire es una mezcla de gases —oxígeno y nitrógeno en mayor porcentaje y muchos otros gases más en menor proporción, incluyendo vapor de agua. Y es ahí donde entra a jugar a favor nuestro el agua.
La temperatura se asocia al movimiento (agitación o vibración) que sufren los átomos que forman un elemento.
Cuando existe cambio de fase del agua de sólido para líquido, o de líquido para vapor, el hielo o agua necesita de calor. Logrando que el agua presente en el aire o superficies de nuestros hogares se transforme en vapor, podremos hacer con que el ambiente se sienta un poco más agradable.
¿Cómo puedo hacer esto en casa?
Una manera simple es dejando una toalla mojada extendida para que se seque. Si a esto le sumamos el factor mecánico —como el viento que produce un ventilador— la acción será más eficiente.
Si mojas las paredes externas y los alrededores de tu casa, en un episodio de altas temperaturas, también lograrás un efecto de refrescante. El agua usará el calor de las superficies más calientes, para transformarse en vapor.
Además de los ventiladores, un otro aliado en esta época de altas temperaturas pueden ser los humidificadores de aire. Además de aumentar la humedad relativa de tu entorno, las minúsculas gotitas que expelen ayudarán a "robarle el calor" al aire a su alrededor.
Abanicarse te ayuda a perder calor
En altas temperaturas, nuestro cuerpo transpira para poder enfriarse. La transpiración extrae calor de nuestro cuerpo para poder pasar de estado líquido a gaseoso. Y si además usas un abanico o ventilador, acelerarás el proceso.