¿Sana el ozono? El agujero en la capa protectora del planeta
Este 16 de septiembre se conmemora el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono. ¿Cuánto sabes de ella y del daño que le hemos provocado?
En 1994, Naciones Unidas proclamó el 16 de septiembre como el Día Internacional de la Preservación de la Capa de Ozono. “La atmósfera representa la manta que cubre nuestro planeta y está integrada por una mezcla homogénea de gases y aerosoles (partículas sólidas y líquidas) que conocemos como aire. El aire que respiramos está compuesto básicamente por dos elementos: Nitrógeno (78%) y oxígeno (21%). Sólo un 1% representa el resto de los gases y, entre ellos, está el ozono”, detalla el meteorólogo Juan Crespo en el artículo “El ozono y su herida en la atmósfera” de la Dirección Meteorológica de Chile (DMC).
“La capa de ozono actúa como un escudo protector ante la radiación ultravioleta (UV) proveniente del Sol. El agotamiento de la capa de ozono se produce como consecuencia del uso antrópico de diversos componentes llamados sustancias agotadoras de la capa de ozono (SAO)”, reseña el Sistema Nacional de Información Ambiental (SINIA) del ministerio de Medio Ambiente.
Crespo, del Servicio de Climatología de la DMC, describe que “debido a su importante rol, el ozono estratosférico se considera ozono bueno. En contraste, el exceso de ozono en la superficie de la Tierra, que se forma a partir de contaminantes, es considerado ozono malo, ya que puede ser dañino para la vida”.
El ozono es un gas compuesto por tres átomos de oxígeno (O3). La mayor parte de este químico se ubica en la estratósfera, capa inmediatamente posterior a la tropósfera en dónde desarrolla nuestra vida.
Daño y reparación
En los años 70, los científicos descubrieron que se estaba creando un agujero en esta cobertura protectora producto de la actividad humana. El agujero en la capa de ozono “corresponde a una disminución importante en la cantidad de ozono que existe naturalmente en la capa de ozono polar, la cual se desarrolla en época primaveral. Esta disminución se debe a la presencia de contaminantes químicos derivados de la industria de refrigerantes, aerosoles, pesticidas y, en menor proporción, de las erupciones volcánicas, que son transportados hacia los polos y finalmente, por acción de la radiación proveniente del Sol, reaccionan con las moléculas de ozono provocando su destrucción”, revela la DMC a través de “El ozono y su herida en la atmósfera”.
Debido a este daño, en “1985 se adoptó la Convención de Viena para la Protección de la Capa de Ozono. Bajo el Protocolo de Montreal, los gobiernos, los científicos y la industria se comprometen a trabajar juntos para eliminar el 99% de todas las sustancias que reducen la capa de ozono. Gracias este protocolo, la capa de ozono se está recuperando y se espera que vuelva a los valores anteriores a 1980 para mediados de siglo”, afirma António Guterrez, secretario general de las Naciones Unidas (ONU).
“A pesar de que el agujero de ozono aún nos acompaña buena parte de este siglo, la capa de ozono está recuperándose lentamente. Este año su extensión llegó a 15 millones de kilómetros cuadrados a fines de agosto pasado. Esta cifra es levemente superior al promedio 1979-2019 para la fecha”, aseguran desde el grupo de investigación Antarctica de la Universidad de Santiago (Usach).
Raúl Cordero, climatólogo líder de Antarctica, explica en entrevista con La Tercera que el agujero debiera cerrarse “en 2060 que es el tiempo que falta para erradicar las sustancias destructoras de ozono. Todos los gases que contienen cloro y flúor están prohibidos, y fueron reemplazados por otras alternativas”.