El deshielo de los glaciares: una carrera contrarreloj por el futuro del agua

El Día Mundial del Agua 2025 pone el foco en la urgente necesidad de preservar los glaciares, gigantes de hielo que se derriten a un ritmo alarmante, amenazando el suministro de agua dulce y el equilibrio climático del planeta.

Glaciares
El rápido retroceso de los glaciares está alterando el ciclo del agua, poniendo en riesgo el acceso al recurso para millones de personas.

Cada gota de agua que bebemos, cada río que riega los campos, cada copo de nieve que cae en invierno, forma parte de un ciclo infinito, un viaje que el agua lleva realizando desde mucho antes que el ser humano habitara este planeta.

Los glaciares son una etapa crucial de ese viaje, verdaderos "depósitos de agua" congelada que hoy se derriten a un ritmo sin precedentes, alterando el pulso del planeta y poniendo en jaque nuestro futuro hídrico.

Para el Día Mundial del Agua 2025, la Organización de las Naciones Unidad (ONU) ha puesto el foco en la "Preservación de los Glaciares", enfatizando su rol esencial en la regulación del agua dulce y la urgente necesidad de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para frenar su desaparición.

El corazón helado del planeta

Los glaciares son mucho más que hielo. Estas colosales estructuras que han custodiado el agua dulce del planeta durante milenios, son ahora víctimas del calentamiento global, y su desaparición amenaza con desencadenar una crisis hídrica de proporciones incalculables.

Según datos de la ONU, almacenan alrededor del 70% del agua dulce del mundo ¡Una cantidad comparable a llenar más de mil millones de piscinas olímpicas!

Durante las estaciones cálidas, se derriten lentamente, liberando agua que alimenta ríos y lagos. Sin embargo, el cambio climático está acelerando este proceso, provocando que los glaciares retrocedan a un ritmo sin precedentes.

Según la Organización Meteorológica Mundial (OMM), en 2023 los glaciares perdieron más de 600 gigatoneladas de agua, suficiente para llenar 240 millones de piscinas olímpicas, la mayor pérdida registrada en 50 años.

Además, cada capa de nieve y hielo que se acumula a lo largo de los años atrapa burbujas de aire, polen y polvo, que actúan como cápsulas del tiempo, revelando a los científicos cómo era el clima hace miles, incluso cientos de miles de años.

El impacto en las comunidades

El derretimiento de los glaciares no es solo un problema ambiental; es una crisis humanitaria. Casi dos mil millones de personas dependen del agua de los glaciares para beber, regar cultivos y generar energía.

Comunidades enteras, especialmente en regiones montañosas y costeras, enfrentan un futuro incierto.

Inundaciones
A medida que los glaciares desaparecen, los flujos de agua se vuelven impredecibles, causando sequías prolongadas, inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra.

Por ejemplo, en el Himalaya, donde el 40% de la población depende del agua de los glaciares, la reducción de estos flujos podría dejar a millones sin acceso a agua potable y afectar la producción de alimentos.

Uno de los efectos más preocupantes del derretimiento de los glaciares es el aumento del nivel del mar, que desde 1900 ha subido aproximadamente 20 centímetros, y gran parte de este aumento se debe a la pérdida de hielo glaciar.

Para ponerlo en perspectiva, si todos los glaciares del mundo se derritieran, el nivel del mar podría aumentar más de 60 metros, lo que equivale a la altura de un edificio de 20 pisos.

Esto sumergiría ciudades costeras como Nueva York, Shanghai y Mumbai, desplazando a millones de personas y alterando para siempre el mapa del mundo.

Un efecto dominó que debemos detener

El derretimiento de los glaciares es una pieza más de la compleja crisis climática que enfrentamos. ¿Podemos frenar esta torre que se derrumba?

Los expertos coinciden: la solución pasa por reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y adoptar estrategias locales de adaptación.

Limitar el calentamiento global a 1,5 °C podría salvar hasta dos tercios de los glaciares ubicados en sitios Patrimonio de la Humanidad, según la UNESCO.

Algunas iniciativas ya están en marcha: desde la restauración de ecosistemas de alta montaña para retener agua, hasta proyectos innovadores como las "Stupas de Hielo" en el Himalaya, estructuras artificiales que almacenan agua congelada para su liberación gradual en épocas secas.

Este Día Mundial del Agua es un recordatorio de que proteger nuestras reservas congeladas es proteger el agua que bebemos, los alimentos que cultivamos y el planeta que llamamos hogar. El tiempo de actuar es ahora, antes de que el hielo se convierta en un frío recuerdo.

Fuentes y referencias de la noticia:

- United Nations. (2025). World water Day 2025. Sitio web oficial del Día Mundial del Agua.

- World Economic Forum. (2025). What is World Water Day?. Publicado en la sección “historias” de la web de la institución.