Extinción silenciosa: ¿están desapareciendo las abejas en América Latina?

Un estudio pionero de cooperación internacional revela preocupantes pérdidas de colmenas de abejas, clave para la biodiversidad y nuestra producción de alimentos

Abeja de miel
El primer estudio a gran escala sobre la pérdida de colonias de abejas manejadas en Latinoamérica, evidenció que la abeja europea está desapareciendo de los países de la región.

Un zumbido de alerta recorre el planeta. Las abejas, insecto clave para la biodiversidad y la polinización, están desapareciendo a un ritmo preocupante.

Por primera vez, un estudio a gran escala revela la magnitud de la crisis de las abejas en América Latina. Este trabajo científico publicado en la revista Nature Scientific Reports aporta datos clave para comprender y abordar esta problemática.

Un problema más grande de lo que parece

Seguro has oído que las abejas están en peligro, pero ¿sabías que en América Latina estamos perdiendo hasta un 30% de las colmenas de abejas melíferas cada año? Y si hablamos de las abejas sin aguijón, la cifra es aún más alta: casi el 40%.

Estos datos vienen del estudio a gran escala que investigó lo que realmente está pasando con las colmenas en diferentes países de América Latina, y los resultados no son nada alentadores.

Andrés Vargas, investigador de la Universidad de Chile y uno de los autores del estudio, comenta en un comunicado de esta institución que estas pérdidas no solo son una mala noticia para los apicultores, sino para todos nosotros.

"Las abejas son esenciales para la polinización de muchos cultivos que consumimos diariamente", explica. "Si las abejas desaparecen, también lo hará una buena parte de los alimentos que dependen de ellas, como frutas, verduras y semillas", añade.

El verano, el peor enemigo de las colmenas

La importancia de esta investigación radica en que proporciona datos concretos y científicos sobre una problemática que afecta a toda la región.

Un dato curioso del estudio es que las abejas sufren más en verano que en invierno. Durante los meses más calurosos, las colmenas se debilitan por la falta de recursos, el aumento de las plagas, y la dificultad de los apicultores para manejar la situación sin afectar la producción de miel.

Apicultores y colmenas
Durante los meses cálidos, las abejas son más vulnerables a enfermedades y plagas. La falta de tecnología y tratamientos adecuados, junto con el cambio climático, dificulta a los apicultores mantener colmenas saludables.

Uno de los mayores problemas es el parásito Varroa destructor, que ataca a las abejas melíferas y se reproduce con más fuerza en verano.

Esto deja a las colmenas muy debilitadas, lo que a menudo lleva a su colapso durante el invierno.

"Los apicultores no pueden usar ciertos tratamientos durante el verano porque interfieren con la miel, así que las colmenas llegan al invierno en muy mal estado", señala Vargas.

Las causas detrás de esta crisis

Este estudio a gran escala nos revela las consecuencias, pero también nos recuerda porqué está ocurriendo esta “silenciosa” desaparición de las colmenas.

Aunque las causas de la disminución de las poblaciones de abejas son múltiples y complejas, hay algunas que están bien identificadas:

  • El uso indiscriminado de pesticidas: muchos productos químicos utilizados en la agricultura son tóxicos para las abejas y otros polinizadores;
  • La pérdida de hábitat: la deforestación y la urbanización destruyen los hábitats naturales de las abejas, reduciendo la disponibilidad de fuentes de alimento y sitios de anidación;
  • El cambio climático: las variaciones en las temperaturas y los patrones de lluvia afectan el ciclo de vida de las plantas y, por lo tanto, la disponibilidad de alimento para las abejas;
  • Los parásitos y enfermedades: el ácaro Varroa es una de las principales amenazas para la salud de las colmenas.

Aunque las cifras son preocupantes, este estudio también señala el camino a seguir. Es fundamental que los gobiernos apoyen a los apicultores con políticas que regulen el uso de pesticidas y brinden incentivos para mejorar las condiciones de trabajo.

"Si no hay datos, no pueden haber políticas públicas".

Andrés Vargas, médico veterinario de la Facultad de Ciencias Veterinarias y Pecuarias (FAVET) de la Universidad de Chile.

Al respecto, Vargas comenta que "los apicultores necesitan apoyo, no solo para su subsistencia, sino para garantizar la seguridad alimentaria del país".

El futuro de las abejas, y de nuestra seguridad alimentaria, depende de que actuemos ahora. Proteger a las abejas no es solo responsabilidad de los gobiernos, sino de toda la sociedad.

Con el apoyo adecuado, podemos garantizar que estas colmenas sigan zumbando en nuestros campos por mucho tiempo más.

Fuentes y referencias de la noticia:

- Requier, F., Leyton, M.S., Morales, C.L. et al. First large-scale study reveals important losses of managed honey bee and stingless bee colonies in Latin America. Nature Scientific Reports. (2024).

- Universidad de Chile. Estudio pionero de la Uchile revela pérdidas significativas de colonias de abejas en América Latina. Publicado en UdeChile noticias.(2024).