¡Impresionante! Estrella devora un planeta gigante que la orbitaba
Un grupo de investigadores hicieron un impresionante hallazgo mientras observaban un sistema: una estrella tragó un planeta gigante. Esta impresionante observación puede darnos más informaciones del futuro de los sistemas planetarios.
Cuando una estrella entra al fin de su vida, ocurre algo interesante: ella comienza a expandirse decenas, e incluso, centenas de veces en comparación a su tamaño original. Al ocurrir esta expansión, la estrella pasa a la categoría de gigante o supergigante, dependiendo de su tamaño.
Esto ya era esperado, y logramos ver varias estrellas en esta fase. Una de ellas es la estrella Betelgeuse, una supergigante roja, vecina a nuestro Sol. Y es esperado que el Sol también tenga un final parecido a estas estrellas: se expandirá antes de morir.
En este proceso se espera que las estrellas devoren los planetas que las están orbitando a distancias menores, caso la estrella se encuentre en un sistema planetario. No hace mucho, astronómos observaron, por primera vez una estrella devorando un planeta, un gigante del tamaño de Júpiter.
Evolución de las estrellas
Desde que una estrella nace, va pasando por varias fases en su vida. Estas fases se pueden definir a través de un diagrama HR, que da una relación entre la luminosidad y la temperatura de la estrella.
En el diagrama queda en evidencia una diagonal, llamada de secuencia principal. Una estrella pasa la mayor parte de su vida en la secuencia principal. En esta fase, la estrella se encuentra mayormente ganando su energía de la fusión del hidrógeno en helio.
A medida que el tiempo pasa, la estrella cambia de posición en el diagrama. Luego de la secuencia principal, la estrella pasa, generalmente, a la región de las gigantes rojas, que son estrellas luminosas, sin embargo, frías.
Gigantes rojas
Las gigantes rojas son estrella que ya concluyeron su proceso de fusión de hidrógeno en helio en su núcleo. Mientras su combustible se termina, ella se expande decenas o centenas de veces su tamaño original.
La estrella Betelgeuse, es una estrella supergigante que está a unos 600 años-luz de la Tierra. No hace mucho, ella se volvió famosa producto de las variaciones en su brillo, que sugerían que se encontraba en una fase de supernova. Sin embargo, se trataba apenas del oscurecimiento provocado por una nube de gas.
Al final de esa fase, la estrella encontrará su destino en algún objeto compacto: una enana blanca, una estrella de neutrones o un agujero negro. El destino final depende de la masa de la estrella.
Una estrella que devoró un planeta
Los astrónomos del MIT se encontraban observando los datos del Zwicky Transient Facility, un instrumento que permite la observación de cambios rápidos en el cielo. Con este instrumento, detectaron variaciones de brillo procedentes de una estrella.
El brillo observado era diferente del que se aprecia en eventos como una nova o supernova; era más bien frío, indicando otro proceso. Al usar el telescopio NEOWISE, el grupo se sorprendió al notar que se trataba de un planeta siendo devorado por una estrella, en su proceso de transformarse en una gigante roja.
El planeta, del tamaño de Júpiter, orbitaba muy cercano a la estrella cuando ella se expandió y su atmósfera tragó al planeta. Observaciones recientes mostraron que la estrella regresó a su tamaño inicial, siendo esta la primera fase de su proceso de muerte.
El futuro del Sol y la Tierra serán parecidos
El Sol tiene todavía miles de millones de años por delante, pero su masa indica que su final será muy parecido al de la estrella de esta observación: el Sol se expandirá devorando los planetas más cercanos a él.
Antiguamente, se esperaba que la distancia de la Tierra fuese lo suficientemente grande para que no fuese alcanzada en este proceso. Sin embargo, las actuales proyecciones muestran que nuestro planeta está en el radio posible que el Sol irá a alcanzar.
Entender estos objetos como los recientemente descubiertos es importante para entender más sobre el futuro de nuestro Sistema Solar y cómo será el proceso en sí.