La "enfermedad de los vikingos" heredada de los neandertales
Esta enfermedad, denominada "enfermedad de Dupuytren", tiene una mayor incidencia en la población del norte de Europa, donde los habitantes pueden tener hasta un 2% de su genoma procedente de los neandertales.
Existe una enfermedad poco conocida que dobla y "bloquea" los dedos de quienes la padecen y causa grandes dificultades en la vida cotidiana. Su nombre es "enfermedad de Dupuytren", aunque suele ser más conocida como la "enfermedad del vikingo".
La herencia de nuestros antepasados
Los investigadores ya conocían varios factores de riesgo que aumentan la probabilidad de desarrollar esta enfermedad, como el consumo de alcohol, la diabetes, la edad y la herencia genética. De hecho, se sabía que la enfermedad era significativamente más frecuente en personas de cuya descendencia proviene del norte de Europa.
Ahora, un nuevo estudio concluyó de que la enfermedad puede ser en realidad una herencia genética de origen muy antiguo: según esta teoría, explicada con detalle en la revista científica Molecular Biology and Evolution, la enfermedad del vikingo tiene su origen en los Neandertal (Homo neanderthalensis), uno de los parientes más cercanos al Homo sapiens.
Esta hipótesis se basa en la distribución geográfica de la descendencia genética de ciertas especies extinguidas de Homo. Por ejemplo, se sabe que los habitantes del África subsahariana tienen muy poca herencia de neandertales o denisovanos (Homo denisoviensis u Homo altaiensis), especies que habitaron Europa y Asia hasta hace unos 42.000 años.
En cambio, los habitantes actuales de Europa pueden tener hasta un 2% de su genoma procedente de los neandertales, y ciertas poblaciones asiáticas hasta un 5% de su genoma procedente de los denisovanos. La idea, entonces, es que esta distribución desigual puede ayudar a explicar la diferente prevalencia de ciertas enfermedades genéticas en distintas partes del mundo.
Una distribución geográfica desigual
Para comprobar esta posibilidad, los autores analizaron los datos genéticos de 7.871 pacientes con la enfermedad y 645.880 personas sanas obtenidos de diversas bases de datos.
Mediante la secuenciación del genoma completo, se identificaron hasta 61 variantes asociadas a la enfermedad. Un análisis de datación temporal reveló que tres de ellas eran de origen neandertal, incluidas la segunda y la tercera, en las que la asociación con la enfermedad era más sólida.
Estos resultados llevaron a los investigadores a concluir que la ascendencia neandertal es un importante factor de riesgo en el desarrollo de la "enfermedad de los vikingos" y puede explicar la mayor prevalencia de esta enfermedad en la población del norte de Europa.