La NOAA advierte sobre una temporada 2024 de huracanes en el Atlántico muy activa y por sobre lo normal

Faltando pocos días para el inicio oficial de la temporada de huracanes en el Atlántico Norte y, según las últimas previsiones de la NOAA, esta temporada promete ser más intensa de lo habitual.

huracán sobre el Atlántico
La temporada de huracanes del Atlántico Norte de 2024 promete ser más activa de lo normal debido a las condiciones en el Pacífico y el Atlántico.

A medida que se acerca la temporada de huracanes del Atlántico norte de 2024, que comienza el 1 de junio y finaliza el 30 de septiembre, los pronosticadores del Centro de Predicción Climática (CPC) de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) publicaron su pronóstico oficial de pretemporada hace pocos días atrás.

Los pronósticos indican que hay un 85% de posibilidades de que este año se produzca una temporada de huracanes más activa de lo normal, frente a un 10% de posibilidades de una temporada cercana a lo normal y sólo un 5% de posibilidades de una temporada menos activa de lo normal.

Los meteorólogos esperan la formación de entre 17 y 25 tormentas con nombre, que son sistemas tropicales (tormentas o huracanes) que alcanzan vientos de 62 km/h o más. De las tormentas nombradas, de 8 a 13 podrían convertirse en huracanes, con vientos superiores a 119 km/h, incluidos de 4 a 7 huracanes de categoría intensa, que son aquellos con vientos superiores a 178 km/h clasificados en categoría 3, 4 o 5.

Una temporada normal presenta alrededor de 14 tormentas con nombre, 7 de las cuales son huracanes y 3 huracanes de categorías intensas, según la climatología de 1991 a 2020. Por lo tanto, al comparar con los números pronosticados, vemos que esta temporada efectivamente tendrá actividad por encima de lo normal.

La NOAA también ha publicado la lista de 21 nombres de las tormentas de este año. La primera tormenta en formarse se llamará Alberto y la última se llamará William. Puede suceder que se formen más tormentas de las esperadas y la lista de nombres termine antes de que finalice la temporada, como ocurrió con la temporada de huracanes de 2020, que registró 30 tormentas con nombre, las más activas de la historia, donde las últimas tormentas tuvieron que ser nombrado con las letras del alfabeto griego.

¿Por qué la temporada de huracanes de 2024 será más activa de lo normal?

Entre los principales motivos de esta previsión de una temporada de huracanes más activa de lo normal este año, la NOAA destaca las altísimas y récord de temperaturas en el océano Atlántico Tropical y el desarrollo de La Niña en la segunda mitad de 2024.

Las aguas cálidas del Atlántico Tropical funcionan como combustible para la formación y desarrollo de toda convección profunda en los sistemas tropicales, ya que las aguas cálidas aportan calor y humedad a la atmósfera, elementos importantes para el desarrollo de nubes profundas. Por tanto, con el Atlántico mucho más cálido de lo normal, se espera una disponibilidad aún mayor de calor y humedad para la formación de estos sistemas este año.

Además de la disponibilidad de calor y humedad, también necesitamos algunas condiciones atmosféricas favorables al desarrollo de la convección profunda asociada a estas tormentas tropicales, condiciones que involucran vientos en los niveles bajos y altos de la atmósfera, o en otras palabras, cizalladura del viento.

La combinación de un Atlántico Norte mucho más cálido de lo normal y La Niña que emergerá en la segunda mitad de 2024 impulsará la formación de tormentas tropicales y huracanes este año.

La cizalladura del viento es la variación en la velocidad y dirección del viento a diferentes niveles de altura en la atmósfera. Cuanto mayor es esta variación, hablamos de cizalladura del viento alta, cuanto más baja es, cizalladura baja. En el caso de tormentas tropicales y huracanes, es necesario un ambiente con baja cizalladura del viento, para que toda la estructura vertical del sistema pueda desarrollarse plenamente y permanecer así, sin ser “roto” por las variaciones del viento.

¡Y aquí es donde La Niña ejerce su influencia! A través de sus patrones de teleconexión, cuando La Niña está activa, se produce un debilitamiento de los vientos de alto nivel, que generalmente son mucho más intensos que los vientos de bajo nivel, sobre el Atlántico Norte, lo que reduce la diferencia vertical de los vientos, es decir, ¡reduce la cizalladura del viento!

Así, la combinación de una atmósfera con baja cizalladura del viento sumada a un Atlántico más cálido de lo normal hace que esta temporada de huracanes ya tenga un gran potencial para ser muy activa, especialmente a partir de la segunda mitad de 2024, cuando La Niña ya estará activa, ¡y cuando la temporada llega a su punto máximo!