Brecha en la norma: Paipote excedió máximo contaminantes en casi 500%

Para interiorizarnos en esta noticia, contaremos con la información revelada por el Centro de Investigación Periodística (CIPER Chile). Además, retrocederemos en el tiempo hasta el día 23 de mayo del 2021 y nos ubicaremos en la fundición de la Empresa Nacional de Minería (ENAMI) en Paipote, Región de Atacama.

Ese día, a las 09:00 h, la fundición registró un promedio horario de 2.027,8 micrógramos por metro cúbico (µg/m³) de dióxido de azufre. Pero el dilema está en que, el límite impuesto por la Norma de Calidad del Aire para este gas, es de 350 µg/m³. Es más, este episodio supera a todo lo que hemos visto en los casos de Puchuncaví, Región de Valparaíso.

Durante esa jornada, el superintendente de operaciones de la fundición Paipote, alertó a su jefatura que la información enviada a las autoridades ambientales no correspondían a lo sucedido. Los datos fueron alterados, bajando el perfil al nivel crítico registrado. Sorprendentemente, nueve días más tarde, el superintendente fue desvinculado de sus funciones; en buen chileno ¡lo despidieron por decir la verdad!

Lo indignante es que la Norma de Calidad del Aire que, se supone tiene el objetivo de proteger la salud de las personas, tiene un vacío enorme. Y, como si fuera poco, las autoridades ambientales de nuestro país se jactan que, como sociedad chilena, estamos al nivel europeo. Nada más alejado de la realidad.

Exceder la Norma hasta 131 veces ¡es aceptable!

Cierto es que la norma chilena coincide con la europea, en cuanto al nivel máximo de emisión de dióxido de azufre. Pero la diferencia significativa está en la cantidad de veces que se puede exceder este límite. En Europa, son sólo 24 veces al año ¿en Chile? El decreto del Ministerio del Medio Ambiente (MMA) permite que este tipo de situaciones se repita hasta 131 veces en un año.

Por otra parte, en la fundición se consideran tres condiciones atmosféricas para su plan de operaciones: desfavorable, regular y favorable. El 23 de mayo 2021, se informó que el escenario meteorológico era uno de los más desfavorables y críticos que se había visto en los últimos años. Como consecuencia de ello, las operaciones debían restringirse al mínimo, algo que nunca sucedió.

Dentro de los impactos que se generan sobre la salud de las personas, por estos excesos de dióxido de azufre, se encuentran las intoxicaciones agudas. Inclusive, puede llegar a causar una insuficiencia respiratoria. Sumado a ello, se origina una crisis en el servicio de urgencias por la capacidad con que cuentan para atender a las personas.

Los signos vitales se ven afectados por quienes se exponen a este tipo de aire. Se produce pesadez en los ojos, irritación en la garganta y sensación de ahogo. Aquí, ya es necesario administrar oxígeno para restablecer el estado de salud. Una vez más, son los habitantes de un pequeño lugar quienes pagan las consecuencias de los vacíos legales que existen en Chile.