Los 10 pueblos con los nombres más raros de Chile
De Chigualoco a Salsipuedes, pasando por Quitacalzón y Peor es Nada. Te presentamos una lista con los nombres de pueblos más curiosos de nuestro país. Algunos nombres parecen irreales, pero verás que tienen su explicación.
No cabe duda de que la creatividad y el ingenio del chileno da para mucho. Algo que queda de manifiesto en este listado con los nombres de pueblos más curiosos del país.
Pero, aunque algunas de estas denominaciones parecen inverosímiles, lo cierto es que la mayoría tiene al menos una justificación para esos curiosos nombres.
Acompáñanos a descubrir cuáles son los pueblos con los nombres más raros de Chile y la historia que hay detrás de cada uno de ellos. Algunos también tienen gentilicios bastante particulares.
Peor es nada
El primer pueblo del listado se encuentra en la comuna de Chimbarongo, en la Región del Libertador Bernardo O'Higgins y tiene un nombre que invita a la conformidad.
Según cuenta la leyenda, el particular nombre de esta localidad surgió en el siglo XIX, tras el fallecimiento de Agustín Sánchez, el propietario de un extenso fundo de la zona. En su testamento, Don Agustín dejó estipulado que las tierras serían divididas entre sus hijos. Sin embargo, la división no fue muy equitativa, ya que el terreno más pequeño fue para su hija menor, quien al escuchar el testamento exclamó “peor es nada”.
Esta anécdota se repitió entre los habitantes de la zona a tal punto que, con el paso de los años, llegó a ser el nombre oficial del pueblo y, en la actualidad, a los habitantes de esta zona se les conoce como peoresnadinos.
Salsipuedes
El siguiente pueblo también está en la Región del Libertador Bernardo O'Higgins, pero en la comuna de Malloa.
Esta localidad tiene un nombre que puede parecer intimidante, pero que en realidad hace referencia a lo difícil que resultaba salir del pueblo cuando crecía el río producto de las lluvias, ya que el único acceso solía ser un endeble puente peatonal.
En la actualidad, el acceso al pueblo ha mejorado bastante, por lo que se puede entrar y salir de él sin problema.
El gentilicio es salsipuedino.
Chigualoco
Chigualoco es una caleta de pescadores ubicada entre Tongoy y Los Vilos, en la Región de Coquimbo.
El nombre de esta localidad recuerda a una conocida expresión coloquial. Sin embargo, esto sólo es fruto de la coincidencia, ya que el nombre de la caleta en realidad proviene del mapudungún Chiway lafko, que quiere decir neblina de agua de mar.
La Calor
La Calor es una localidad rural de la comuna de San Clemente, en la Región del Maule.
Aunque el nombre sugiere que se trata de un sitio muy caluroso, lo cierto es que en La Calor no hace tanto calor como uno podría suponer. De hecho, en invierno es un lugar más bien frío en el que incluso cae nieve.
¿Cuál es el motivo de este nombre entonces? Lamentablemente, de momento no hay explicación ni leyenda urbana que nos permita responder a esta incógnita.
Lo que sí sabemos es que el gentilicio es calorenses, no acalorados, como más de alguien podría pensar.
Entrepiernas
Se trata de una zona rural de la comuna de Quilleco, en la Región del Biobío, la cual se solía llamar Entre Piedras. Sin embargo, los habitantes fueron modificando el nombre de la localidad a otro más sugerente, como Entrepiernas.
El motivo para esta llamativa denominación es que esta zona se encuentra en un lugar en que el camino se separa en dos, en forma similar a unas piernas abiertas.
El gentilicio es Quillecanos, debido a la comuna a la que pertenece esta zona rural.
Cariño Botado
Cariño Botado es una localidad de la comuna de San Esteban, en la Región de Valparaíso.
Según cuenta la leyenda, el melancólico nombre de esta localidad se remonta hasta los tiempos de la Independencia. Se dice que por esos años, los habitantes de la localidad prepararon un generoso banquete para las tropas del Ejército Libertador. Sin embargo, los soldados no aceptaron esta suntuosa comida, alegando que ese mismo día debían reunirse con Bernardo O'Higgins, José de San Martín y el resto del Ejército Libertador.
Se cree que los habitantes del pueblo tomaron este acto como un desaire, por lo que no quisieron comerse los alimentos y se los dieron a los pájaros. Ante este desafortunado incidente surgió el actual nombre del pueblo.
Purgatorio
Purgatorio es una aldea rural de la comuna de Santa Juana, en la Región del Biobío.
Su nombre, un tanto lúgubre, se debe a que el ingreso a esta localidad solía ser muy complicado. Por lo que, a modo de broma se decía que quien lo conseguía, lograba expiar todos sus pecados.
Otra justificación para esta inusual denominación, es que la aldea se encuentra muy cerca de la Cordillera de Nahuelbuta, por lo que el Sol sólo ilumina hasta cerca de las cinco de la tarde.
El gentilicio de sus habitantes es santajuaninos, debido a la comuna a la que pertenecen.
Pata de Gallina
Corresponde a un sector rural de Contulmo, en la Región del Biobío.
Su peculiar nombre se debe a que se encuentra en un sector en que el camino de Contulmo a Huillinco se divide en tres partes, en forma similar a la pata de una gallina.
Debido a este hecho y, por supuesto, a la creatividad de sus habitantes, los huillincanos, este sector adquirió este llamativo nombre.
Reputo
El siguiente pueblo del listado se encuentra al interior de Cañete, en la Región del Biobío.
Su nombre, lejos de tratarse de un insulto, se debería a la expresión mapuche Rüpütü que quiere decir paso o camino, ya que en ese sitio se encontraba el único paso hacia el Puel Mapu, la parte del territorio mapuche que está al este de la Cordillera de los Andes.
Quitacalzón
La localidad de Quitacalzón se encuentra al norte de Valdivia, en la Región de los Ríos.
No hay una versión oficial que indique el origen de este particular nombre. Sin embargo, algunas explicaciones que circulan por internet sugieren que el nombre podría hacer referencia a los calzones rotos, un dulce típico chileno.
También se ha sugerido que esta denominación surgió durante el periodo colonial, ya que por esos tiempos se le llamaba calzón al atuendo exterior que los hombres vestían de la cintura para abajo.
Según esta explicación, en la zona existían numerosos caudales de agua y no muy buenos medios para cruzarlos. Por lo que, quien quisiera llegar a esta localidad debía despojarse momentáneamente de sus calzones para cruzar los ríos o canales. De allí el nombre de quitacalzón.