Los beneficios del senderismo para la salud física y mental, según los expertos
Caminar kilómetros hasta llegar a la meta no es fácil. La actividad del senderista requiere de un profundo conocimiento del paisaje. Estos son los beneficios que aporta física y mentalmente a la persona que lo practica.
El sedentarismo es uno de los males del siglo XXI. El otro, el estrés. La era digital ha hecho que ambos conceptos dominen el día a día de millones de personas. En este contexto, hay una actividad que, aunque parezca simple, emerge de manera poderosa para mejorar la salud física y mental de las personas: es el senderismo.
El senderismo, una actividad para todas las edades
A diferencia de otras actividades físicas, el senderismo no exige una gran condición física ni habilidades especiales, lo que lo convierte en una opción accesible para personas de todas las edades y niveles de experiencia. ¿Puede el senderismo considerarse un deporte? Los expertos aseguran que sí y, además, aporta múltiples beneficios físicos al organismo.
Fortalece los músculos y los huesos
Caminar por terrenos irregulares involucra diversos grupos musculares, tonificando piernas, glúteos, abdomen y espalda. Además, el impacto del senderismo estimula la densidad ósea, previniendo la osteoporosis.
Mejora la circulación sanguínea
Hacer senderismo mejora la circulación. Caminar a buen ritmo aumenta la frecuencia cardíaca y la respiración, fortaleciendo el corazón. Esto reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares como infartos y accidentes cerebrovasculares.
Quema calorías
El senderismo quema una gran cantidad de calorías, lo que lo convierte en una excelente herramienta para mantener un peso saludable o perder peso de forma gradual.
Fortalece el sistema inmunológico
El contacto con la naturaleza y la exposición al aire fresco estimulan la producción de glóbulos blancos, fortaleciendo el sistema inmunológico y haciéndonos más resistentes a las enfermedades.
Beneficios mentales del senderismo
El senderismo es, además, una actividad que ayuda a la persona a cuidar su salud mental. Así es cómo lo consigue, según los expertos.
Reduce el estrés
Caminar en un entorno natural induce la liberación de endorfinas, conocidas como las "hormonas de la felicidad". Estas endorfinas combaten el estrés, la ansiedad y la depresión, mejorando el estado de ánimo y la sensación de bienestar.
Regula el ciclo del sueño
La actividad física durante el día ayuda a regular el ciclo del sueño, combatiendo el insomnio y mejorando la calidad del descanso nocturno.
Mejora la concentración
Caminar en la naturaleza permite desconectar del ruido y las preocupaciones diarias, favoreciendo la concentración, la claridad mental y la creatividad.
Favorece la autoestima
Superar desafíos físicos, como subir cuestas o atravesar terrenos difíciles, aumenta la autoestima y la confianza en uno mismo.
Fomenta la conexión social
El senderismo puede realizarse en solitario o en grupo, fomentando la interacción social, la amistad y el sentido de pertenencia a una comunidad.
En definitiva, el senderismo es una actividad popular que ayuda a la persona a evitar el sedentarismo sin necesidad de realizar una actividad física muy intensa. Se estima, que más del 12% de la población española lo practica de manera regular. No es de extrañar, pues es una actividad que ayuda al cuerpo y a la mente a sentirse sanos.