Nube Cavum: ¿por qué se producen extraños agujeros en el cielo?
Las nubes Cavum se encuentran entre las formaciones de nubes más curiosas posibles de observar en los cielos. Una de ellas fue avistada recientemente en el sureste de Francia. ¿Por qué se forman? Te lo explicamos aquí.
Incluida en el Atlas Internacional de Nubes de la Organización Meteorológica Mundial en 2017, la nube Cavum se muestra normalmente en la forma de círculo o elipse, como un agujero bien definido cuando vista desde abajo, que parece haber sido recortado en una capa de nubes del tipo altocúmulos o cirrocúmulos, con tan solo pequeños filamentos de nube en el centro del agujero. A partir de este agujero es posible ver el cielo azul de las capas superiores de la atmósfera. ¡Y también es impresionante su vista desde arriba!
En la imagen satelital, capturada el 14 de enero de 2023, que cubre parte del sureste de Francia, se puede observar una extensa nube cavum. El sensor MODIS (Espectrorradiómetro de imágenes de moderada resolución, por su sigla en inglés) a bordo del satélite Aqua de la NASA, captó una imagen en color natural de este fenómeno.
La nube cavum, también conocida por hole-punch cloud y fallstreak cloud, se forma en condiciones de baja temperatura e inestabilidad atmosférica generada por un avión que se mueve a través de las nubes. Vista desde abajo, puede parecer que parte de la nube se está cayendo del cielo.
¿Cómo se forma la nube Cavum?
Las nubes cavum se forman en mantos de nubes medias (altoestratos y altocumulus) compuestas por gotas de agua líquida sobreenfriada; o sea, las gotas continúan líquidas aún cuando su temperatura esté por debajo del punto de congelación del agua (0ºC). Aún así, incluso las gotas superenfriadas tienen sus límites.
El enfriamiento extra, que se produce por sobre las alas de los aviones, puede estimular las gotas y llevarlas al punto de congelación cuando uno de ellos cruza la capa de nubes. Los cristales de hielo producen cada vez más cristales de hielo, a medida que las gotas siguen congelándose. Luego de un tiempo, se vuelven lo suficientemente pesadas, por lo que caen del cielo, dejando un vacío, un agujero en la capa de nubes.
Así se formó la nube capturada en el sureste de Francia
Los cristales de hielo que se precipitan son, muchas veces, visibles en el centro del agujero como rastros de precipitación —fenómeno conocido con el nombre de virga: precipitación que cae de la nube pero que nunca llega al suelo. Cuando los aviones pasan a través de las nubes en un ángulo bien pronunciado, forman una cavum pequeña y circular.
Si lo hacen con un ángulo pequeño, pueden producir extensas nubes cavum, con largas huellas de virga; este fue el caso de la nube capturada que se extendió por una gran área geográfica del sureste de Francia. Existen más factores que pueden determinar la extensión de este tipo de nubes, como por ejemplo la espesura de la capa, la temperatura del aire y el grado de cizalle horizontal del viento.