¿Qué es la Luna Azul? El fenómeno que iluminará los cielos de agosto

Se acerca el momento de apreciar la Luna Llena del mes. Pero en esta ocasión tendrá una peculiaridad, o más bien dos: será una Superluna y una Luna Azul a la vez. Descubramos juntos por qué se le llama Azul.

superluna
Este mes nos regalará una Superluna Azul. ¡No te la pierdas!

Este lunes 19 de agosto podrás disfrutar de una atípica Luna Llena. Te cautivará el momento en que se asome por el horizonte una Superluna que iluminará el cielo nocturno. Por otra parte, esta Luna tiene una rareza, se le denomina Azul por una particularidad: ¿cuál será?

Vamos a entender –antes de descubrir el origen de la Luna Azul– por qué se podrá observar una Superluna el lunes, ¡que además será la primera del año! La Luna estará llena por tres días, desde el domingo por la mañana hasta el miércoles por la mañana temprano, comenta la NASA.

Pero únicamente este lunes aparecerá visiblemente más grande, ya que estará dentro del 90 % de su aproximación más cercana a la Tierra. Y así es como veremos la Superluna de Esturión, nombrada de este modo por los nativos americanos por haber sido época de pesca de esturiones, una especie de pez rara en la actualidad.

¿Por qué se le conoce como Luna Azul?

A pesar de llevar este nombre, la Luna Llena de agosto no se verá azul. En inglés existe un dicho que se refiere a este fenómeno: “once in a Blue Moon”, que se traduce como "una vez durante una Luna Azul", y se refiere a la ocurrencia de algo extraño o poco probable. Veamos entonces el motivo de este nombramiento.

En realidad, aún no se conoce bien su origen e incluso se cree que sea parte de un error de interpretación: a esta Luna la envuelve un gran misterio. Una Luna Azul puede ser estacional y calendárica.

Luna Azul estacional

Una Luna Azul estacional es la tercera Luna Llena en una estación astronómica con cuatro Lunas Llenas. Esta definición fue concebida por el antiguo Maine Farmer's Almanac, un almanaque que data del siglo XIX.

El 19 de agosto presenciaremos una Luna Azul estacional, debido a que tendremos cuatro lunas, en vez de tres, durante esta estación (invierno en el hemisferio sur).

La aparición de una decimotercera Luna Llena en un año "alteró la disposición de los festivales de la Iglesia", comenta el sitio Time And Date. El infortunio asociado al número 13 y las dificultades para calcular la ocurrencia de una Luna Llena de este tipo hicieron que el plenilunio adicional fuera nombrado Luna Azul. Esto además llevó a que el calendario eclesiástico cristiano utilizara las fases de la Luna para determinar las fechas exactas de los días festivos como la Cuaresma y la Pascua.

Luna Azul calendárica

La definición más popular corresponde a la que se emplea en la segunda Luna llena en un mes. Normalmente los meses cuentan con una Luna Llena, pero cuando ocurre en los primeros días del mes, pudiera darse otra al final, debido a que el tiempo entre dos Lunas Llenas sucesivas es de aproximadamente 29 días.

A este segundo plenilunio se le conoce como Luna Azul calendárica. Sin embargo, en esta ocasión su nombre se debe a una mala interpretación hecha originalmente por el astrónomo aficionado James Hugh Pruett, error que años después tomó vida y siguió circulando con esa denominación.

¿Es común presenciar una Luna Azul?

Aunque parezca increíble, las Lunas Azules más raras son las estacionales: cada dos o tres años se puede ver una. Esto se debe a que un ciclo lunar tiene una duración exacta de 29,5 días, lo que significa que se necesitan 354 días para completar 12 ciclos lunares, explica Star Walk en un artículo. Como es menos que los 365/366 días de un año, tarda en ocurrir una Luna "extra" en una estación. Por este motivo, es más común observar una Luna Azul calendárica.

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La Luna Llena podría tomar tonalidades azules cuando se ve a través del humo de una erupción volcánica o cuando la luz intercepta ciertos tipos de nubes.

A veces tendemos a pensar que la Luna lleva este nombre por la tonalidad que toma durante la noche, aunque ya descubrimos que no es por este motivo. Pese a esto, no es imposible verla azul. En raras ocasiones, las cenizas volcánicas y el humo, o las gotas de agua en el aire y ciertos tipos de nubes pueden contribuir a esas tonalidades del plenilunio.

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