¿Qué es y cómo se contagia el dengue? Los peligros ante la picadura del temido zancudo “Aedes Aegypti”
En Chile, en lo que va de 2024, ya se han reportado casos autóctonos en Rapa Nui e importados en el territorio nacional sudamericano. ¿Cuáles son las características del mosquito vector? ¿Qué hacer ante su propagación?
El Ministerio de Salud (Minsal) confirmó casos autóctonos de dengue en Rapa Nui, mientras que en Chile sudamericano ya suman más de 80 las personas que sufren de este mal luego de contagiarse en el extranjero.
Una situación que enciende las alarmas en el país, considerando además, la rápida propagación que ha experimentado esta enfermedad por gran parte de Sudamérica con alertas sanitarias, por ejemplo, en Perú, Brasil, Uruguay, Paraguay y Argentina.
El cambio climático ha ampliado el rango de reproducción de los mosquitos vectores, tanto en América como en el mundo. Ante este escenario, la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirmó que sigue con preocupación los brotes de dengue en América Latina.
El mosquito vector
Aedes Aegypti es el nombre de este mosquito o zancudo pequeño (menos de 1 centímetro), de color oscuro con pintas blancas, originario de Egipto en África, de hábitos nocturnos y que transmite este mal.
En general, los zancudos se alimentan de líquidos vegetales, como el néctar y de la sangre de otros animales. Sin embargo, las hembras son las únicas que pican a los seres humanos, ya que necesitan las proteínas de las personas para la producción de sus huevos.
El caso del mosquito Aedes Aegypti es especial, ya que a través de las hembras, tiene la capacidad de transmitir enfermedades virales como zika, dengue, chikungunya y fiebre amarilla.
Este es un zancudo vector, vale decir, al picar a una persona enferma este se contagia con uno de los virus mencionados. Luego, el insecto ya infectado pica a otro ser humano sano transmitiéndoles el mal.
¿Qué es el dengue?
Este mosquito habita lugares cálidos y húmedos, incluso, cerca de las viviendas en zonas urbanas, con condiciones deficientes de saneamiento y elementos que permiten contener agua estancada (maceteros, neumáticos en desuso, etc.) donde construyen sus criaderos.
La infección por uno de estos serotipos crea inmunidad de por vida solamente contra ese serotipo, por lo cual las personas que habitan un área donde el dengue es endémico, pueden contraer más de una infección por dengue en el transcurso de su vida.
Síntomas del dengue
Las infecciones de dengue provocan un espectro de complicaciones clínicas que van desde un síndrome vírico no específico hasta una enfermedad hemorrágica grave que incluso puede ser mortal.
El dengue se caracteriza por la aparición súbita de fiebre alta, que generalmente supera los 40 °C, entre 4 y 7 días después de haber sido contagiado. De 2 a 5 días después que se presenta la fiebre, puede aparecer una erupción plana y roja sobre casi todo el cuerpo de la persona infectada.
Posteriormente se presenta una segunda erupción parecida al sarampión. Las personas infectadas pueden experimentar una mayor sensibilidad en la piel y sentir mucha molestia.
Otros síntomas pueden ser: fatiga, dolor de cabeza, dolores articulares o musculares, náuseas, inflamación de ganglios linfáticos, vómitos, tos, dolor de garganta y congestión nasal.
¿Cómo prevenir y cuál es su tratamiento?
Debido a que se trata de una enfermedad transmitida por la picadura de un mosquito contagiado, la prevención del dengue se relaciona con recomendaciones específicas para viajeros a zonas donde existe el zancudo y hay casos de dengue. Si viaja a zonas endémicas puede seguir estas recomendaciones:
- Aplique repelente en la piel expuesta, contra insectos que contenga dietiltoluamida.
- Use camisas manga larga y pantalones largos, siempre que se encuentre en exteriores.
- Rocíe su ropa con repelentes, ya que los zancudos pueden picar a través de las vestimentas.
- Exija el uso de mosquiteros en puertas y ventanas de su hotel o residencial.
Para la fiebre del dengue no existe un tratamiento específico. La forma hemorrágica de la enfermedad es más grave y se asocia con pérdida del apetito, vómitos, fiebre alta, dolor de cabeza y dolor abdominal. Pueden ocurrir shock e insuficiencia circulatoria.
En caso de contagio, el paciente necesitará líquidos si hay signos de deshidratación. El paracetamol (Tylenol), que se utiliza para tratar la fiebre alta y debe evitar tomar ácido acetilsalicílico (aspirina), ibuprofeno y naproxeno, ya que pueden incrementar los problemas de sangrado.