Smokehouse Creek: descubre este pavoroso incendio que está devorando Texas, el más grande jamás registrado en el estado
Un incendio forestal fuera de control amenaza a las ciudades del Panhandle de Texas. Mientras tanto, hay varios otros incendios forestales cerca, alimentados por fuertes vientos y aire seco que ya han llegado a Oklahoma.
La situación que está viviendo ahora mismo el norte de Texas y regiones limítrofes de Oklahoma es un verdadero infierno. Las llamas están devorando hectáreas de campo y obligando a los residentes de la zona a evacuar. Tanta es la gravedad que los recursos de extinción de incendios se están agotando a medida que el personal de emergencia responde al resto de incendios que se extienden a lo largo del Panhandle de Texas y hasta Oklahoma.
Incendios alimentados por el cambio climático
Estos últimos años están resultando los más cálidos desde que se tienen registros en muchos lugares del planeta. A medida que cambia el clima, el concepto "temporada de incendios" se vuelve más borroso, comienza antes y dura más tiempo.
La conexión entre calentamiento global e incendios es más que obvia, ha sido acreditada por la comunidad científica. A mayor temperatura, mayor es la intensidad y la extensión del fuego. En la actualidad, también es común encontrarse algún que otro incendio en zonas que anteriormente estaban habitualmente libres de fuego.
Smokehouse Creek, un incendio sin precedentes en Texas
Smokehouse Creek, así lo han llamado, ya es el mayor incendio registrado en Texas. Según las autoridades, ha arrasado algo más de 4362 kilómetros, que correspondaría casi al tamaño de La Rioja. En total, el incendio es uno de los mayores de los 48 estados desde que se empezó a tener un registro fiable en la década de 1980. De momento, solo está contenido el 15 %, veremos cómo evoluciona el fin de semana.
Antes del Smokehouse Creek, el incendio más grande registrado en Texas, denominado East Amarillo Complex, ocurrió en 2006 y devastó más de 367.000 hectáreas.
Panhandle, en Texas, se está quemando y no solo por el mencionado Smokehouse Creek. La situación que está viviendo esta zona, al norte de Texas, es crítica. De momento, hay 3 incendios más activos y un total de más de 5000 kilómetros cuadrados ardiendo, siendo así unos de los fuegos más destructivos de la historia de Estados Unidos.
"Pólvora" en el ambiente
Fue el lunes por la tarde cuando el incendio comenzó a extenderse. Las llamas del Smokehouse eran tan virulentas que llegaron a cruzar el límite de Oklahoma en cuestión de horas.
Según las autoridades, el incendio creció muy rápido porque se dieron condiciones favorables para la extensión del fuego: altas temperaturas, baja humedad relativa y fuertes vientos. Desde la década de 1975, las temperaturas en Texas han aumentado y la humedad relativa en esta región también ha estado disminuyendo.
Aunque se piense que el mayor riesgo de incendio está en verano, en Pandhanle es alrededor de marzo, cuando los vientos soplan fuertes, las temperaturas comienzan a ser más cálidas y la hierba que se ha secado puede incendiarse con rapidez.
¿Cuál es el pronóstico?
El panorama es desolador. Tanta es la gravedad que los recursos de extinción de incendios se están agotando a medida que el personal de emergencia responde al resto de incendios, que se extienden a lo largo del Panhandle de Texas y hasta Oklahoma.
La humedad sigue siendo baja, un cóctel perfecto para la propagación del incendio en zonas, de momento, libres de fuego. Las temperaturas continuarán estando por encima de la media y llegarán a situarse por encima de los 20 ºC hasta mañana. El viento también soplará con intensidad en las próximas horas y con rachas que podrían superar los 30 kilómetros por hora.
En una situación “normal”, si no hay sequía, el paisaje comienza a ponerse verde y el riesgo de incendio es menor. Sin embargo, este año hay más posibilidades de una primavera y verano seco y caluroso.