Tormentas en Israel: tromba marina amenaza la ciudad de Ashdod

El comienzo del 2022 fue caracterizado por el mal tiempo en muchas zonas de Oriente Medio y Asia Menor. El paso de una fría depresión, responsable también por las nevadas que tiñeron de blanco los relieves de Arabia Saudita y el norte de Egipto, produjo severas condiciones climáticas en las costas de Israel, afectadas por lluvias torrenciales, tormentas y granizo. La progresiva afluencia de aire cada vez más frío a grandes altitudes, que desciende de Turquía, sobre las cálidas aguas superficiales del mar de Levante, ha producido la intensificación de la actividad de las tormentas. Algunas de estas tormentas también produjeron varias trombas marinas, como el que se dejó ver ayer en la costa de la ciudad de Ashdod.

Afortunadamente, el vórtice permaneció en el mar, cerca de la costa, sin afectar de cerca los vecindarios de Ashdod. Luego del paso del frente frío y la caída de temperatura que lo acompaña, el frío también provocó un descenso del nivel de nieve en las montañas de Israel, Líbano y Siria, incluso con acumulaciones bastante abundantes a lo largo de las colinas libanesas. En este caso, los abundantes cúmulos se vieron facilitados por la llegada de las corrientes húmedas occidentales que consiguieron dispensar abundantes lluvias, por el considerable efecto barrera orográfica que imponen estas cadenas montañosas.