Estudio aborda el uso de la fuerza en el espacio y propone límites legales al empleo de armas antisatélite

El creciente uso militar del espacio ha generado preocupación por el posible uso de armas antisatélite. Un estudio reciente propone aplicar el derecho internacional sobre el uso de la fuerza para limitar estos riesgos y proteger la paz en el espacio.

vista de un satélite en órbita, con la Tierra de fondo
Los satélites pueden ser atacados mediante impacto directo, interferencia electrónica o ciberataques, poniendo en riesgo servicios clave como GPS, comunicaciones y el monitoreo meteorológico.

Cada vez más, el espacio exterior deja de ser un ámbito exclusivo de la ciencia y la exploración para convertirse en un escenario de competencia estratégica y militar. Satélites que antes eran utilizados principalmente para telecomunicaciones, navegación o monitoreo del clima ahora son vistos también como activos cruciales para la defensa y la seguridad de los Estados. Y como en todo ámbito estratégico, surgen riesgos: uno de los más preocupantes es el uso de armas antisatélite (ASAT).

Las armas ASAT están diseñadas para neutralizar o destruir satélites, ya sea mediante impacto directo, interferencia electrónica o incluso ataques cibernéticos. Aunque aún no se han usado en guerras abiertas, varios países han realizado pruebas de estas armas, lo que ha encendido las alarmas de la comunidad internacional. Además del evidente riesgo de escalada militar, el uso de armas ASAT genera desechos espaciales peligrosos que pueden dañar a otros satélites e incluso afectar el acceso seguro al espacio para todos.

Ante esta situación, muchos se preguntan: ¿pueden los países utilizar este tipo de armas sin consecuencias legales? ¿Qué dice el derecho internacional al respecto?

Un artículo reciente aborda justamente esta pregunta desde una perspectiva poco explorada: la aplicación del jus ad bellum, el conjunto de normas del derecho internacional que regula cuándo un Estado puede usar la fuerza militar contra otro. Esta rama del derecho, que se ha aplicado tradicionalmente a conflictos en la Tierra, también es relevante para las actividades en el espacio. Y esto tiene importantes implicancias.

La legítima defensa tiene límites, incluso en el espacio

En general, el jus ad bellum permite a un Estado usar la fuerza solamente en casos de legítima defensa ante un ataque armado, y siempre cumpliendo con dos condiciones fundamentales: necesidad y proporcionalidad. Esto significa que cualquier respuesta militar debe ser estrictamente necesaria para repeler el ataque y no puede exceder lo mínimo indispensable para lograr ese objetivo.

El artículo argumenta que estos mismos principios deben aplicarse al uso de armas ASAT. Por ejemplo, si un país detecta una amenaza a uno de sus satélites, no puede simplemente destruir un satélite enemigo sin más: debe demostrar que la amenaza era real, inminente, y que no había otra manera menos agresiva de protegerse. Además, debe cuidar que su acción no afecte a satélites de otros países o genere un daño desproporcionado al ambiente espacial.

Frenar los conflictos antes de que comiencen en el espacio

El principal aporte del artículo es mostrar que el jus ad bellum puede ofrecer un marco útil para evitar conflictos armados en el espacio. Si los responsables de las decisiones militares comprenden bien estas reglas y las aplican correctamente, se reducen las posibilidades de que un acto defensivo sea percibido como una agresión injustificada, lo que podría desatar un conflicto mayor.

Muchas funciones esenciales para la vida moderna depende de los satélites, desde las comunicaciones y la navegación GPS hasta la predicción del tiempo y el monitoreo de desastres naturales.

El artículo concluye que, aunque los intentos por regular las armas en el espacio mediante nuevos tratados han fracasado hasta ahora, el derecho internacional vigente ya ofrece herramientas valiosas para limitar el uso de la fuerza en este ámbito. Lo que se necesita es voluntad política, conciencia de los riesgos y un compromiso colectivo por preservar el espacio como un lugar seguro y pacífico.

En este contexto, aplicar correctamente las normas internacionales existentes podría representar un paso concreto hacia una gobernanza más estable del espacio, reduciendo el riesgo de conflictos y promoviendo su uso pacífico y cooperativo.

Referencias de la noticia

- O’Meara, C. (2025). Self-defence in outer space: Anti-satellite weapons and the jus ad bellum. Leiden Journal of International Law, 1–23. doi:10.1017/S0922156524000670