Baja segregada: una de las causantes del tiempo severo en primavera
Caída de granizo, tormentas eléctricas y chubascos son algunos de los efectos producidos por una baja segregada, o núcleo frío en altura. ¿En qué consisten estos eventos atmosféricos y por qué nos preocupa su evolución?
¿Es primera vez o has escuchado hablar sobre las bajas segregadas? Conocidas en otras partes del mundo como "gota fría" o "núcleo frío en altura", es una especie de masa de aire proveniente de la Antártica que se escapa hacia el ecuador, explica el investigador Roberto Rondanelli.
Este es un sistema de baja presión –o núcleo de aire frío con rotación ciclónica– que se separa del flujo general de los vientos de niveles medios y altos de la atmósfera, lo que provoca tiempo severo, en particular en sectores montañosos. Se le asocia un viento norte en su parte delantera y viento sur en la trasera.
En Chile, las bajas segregadas se ubican ocasionalmente frente a la costa del norte chico, lo que favorece que su circulación transporte humedad desde los trópicos y potencie las precipitaciones en esta área geográfica.
Se necesita la combinación de dos factores para causar lluvias: ascenso de aire y vapor de agua. El tiempo severo se origina donde el aire sube y encuentra suficiente vapor de agua en altura; lo que normalmente ocurre es que las tormentas se concentran hacia la cordillera. Se necesita inestabilidad en la atmósfera para generarlas en zonas de valle y costa, es decir, que la burbuja de aire suba y debajo tenga una burbuja de aire cálido menos denso.
Efectos de una baja segregada
Uno de los efectos que más preocupan en la evolución de una baja segregada es la precipitación producida: ¿qué tan intensa y duradera podría llegar a ser? Si es fuerte y ocurre en cortos periodos de tiempo, podría ocasionar grandes desastres, en dependencia del relieve y tipo de suelo de la zona afectada.
Los deslizamientos de tierra o aluviones son otro peligro en regiones con suelos erosionados e inestables, sobre todo con presencia de pendientes pronunciadas o en áreas montañosas, donde se activan las quebradas. También se pueden generar tormentas eléctricas, acompañadas en ocasiones por lluvias torrenciales y granizos.
¿Difícil de predecir?
Para pronosticar y monitorear una baja segregada se necesitan simulaciones de modelos meteorológicos numéricos, imágenes satelitales y radiosondeos que permitan evaluar las condiciones atmosféricas que favorecen o no su evolución.
El análisis de la corriente en chorro o "jet stream" –flujo rápido de vientos en niveles superiores– es fundamental, al igual que el del "bloqueo atmosférico" por altas presiones. Si el jet stream se debilita, se pueden desprender núcleos de aire frío y condicionar la formación de estos sistemas. Por otro lado, si las altas presiones bloquean el avance de los eventos meteorológicos, también favorece que las masas de aire frío queden atrapadas y terminen segregándose.
Definitivamente, la baja segregada es uno de los fenómenos atmosféricos más dinámicos y erráticos que existen, lo que hace compleja su predicción a mediano o corto plazo. Por su evolución rápida, se recomienda siempre hacer un seguimiento continuo para evaluar sus impactos. Por eso se emplea el "nowcasting" o pronóstico a muy corto plazo, que ayuda a disminuir la incertidumbre de su pronóstico.