¿Cómo llegar a Marte en menos tiempo? La NASA piensa en cohetes nucleares

Marte está a una media de 228 millones de kilómetros de la Tierra y nuestras sondas tardan meses o incluso años en llegar hasta allí. En vista de la exploración humana, se vuelve cada vez más importante encontrar una manera de llegar a nuestro vecino en el menor tiempo posible.

Misil
En el futuro, los astronautas podrían llegar a Marte en la mitad de tiempo.

En un futuro no muy lejano, los humanos aspiramos a explorar Marte en persona, lo que se convertirá así en el primer planeta al que llegue nuestra civilización, obviamente después de nuestro planeta de origen.

Marte es el cuarto planeta del sistema solar en orden de distancia al Sol, inmediatamente después de la Tierra, pero esto no significa que esté realmente cerca de nosotros, de hecho se encuentra en promedio a 228 millones de kilómetros de nuestro planeta.

Por lo tanto, comprenderás que el camino para llegar hasta allí no es en absoluto corto, sino que, por el contrario, requiere varios meses o incluso años, considerando tanto el viaje de ida como el de regreso.

Necesitamos desarrollar nueva tecnología

Mientras la NASA, la agencia espacial estadounidense, pretende enviar a los primeros astronautas al planeta rojo durante la próxima década, no hace falta decir que se vuelve cada vez más urgente encontrar una manera de minimizar el viaje para llegar allí.

La base de este largo tiempo de tránsito es el uso de combustible químico tradicional para cohetes. Por este motivo, la NASA está evaluando una alternativa más eficiente a los cohetes propulsados químicamente y está desarrollando cohetes de propulsión nuclear.

Estos utilizan fisión nuclear y algún día podrían impulsar un cohete capaz de tardar sólo la mitad del tiempo en llevar a los astronautas de la Tierra a Marte y luego de regreso a casa.

A estas alturas la tecnología de la fisión nuclear para producir energía está bien consolidada y ya se utiliza también como propulsión de submarinos, por lo que se trataría de reelaborarla para impulsar un cohete espacial.

Cohete
Las ventajas de utilizar un motor de propulsión térmica nuclear son varias.

En la mayoría de reacciones de fisión nuclear existe un núcleo atómico de un elemento químico pesado, como el uranio, al que se envía un neutrón que es absorbido por el elemento pesado. De esta forma el átomo inicial decae en núcleos de átomos de menor número atómico, y por tanto de menor masa, con la emisión de una gran cantidad de energía.

Esta tecnología se llama NTP (Propulsión Térmica Nuclear) y está siendo desarrollada conjuntamente por la agencia espacial estadounidense y la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa.

Los investigadores son bastante optimistas y planean probar y demostrar sus capacidades en 2027. Si este método resultara válido, tendría un potencial increíble porque podría usarse no sólo para cohetes sino también para impulsar otros vehículos espaciales y satélites.

El uso de propulsión nuclear en lugar de propulsión química podría ser preferible por varias razones. En primer lugar, este innovador tipo de cohete expulsaría el propulsor de la tobera del motor muy rápidamente, generando un gran empuje y, por tanto, permitiendo que el cohete acelerara más rápido.

El potencial es infinito

Además, estos sistemas tienen un impulso específico elevado, que mide la eficiencia con la que se utiliza el propio propulsor para generar empuje. Dado que los sistemas de propulsión térmica nuclear tienen un impulso específico que es aproximadamente el doble que el de los cohetes químicos, esto significa que podrían reducir efectivamente el tiempo de viaje a la mitad.

Por el momento, el tiempo de viaje para llegar a Marte se estima en unos 6/7 meses. Con el uso de esta nueva tecnología, los futuros astronautas podrían llegar al planeta rojo en sólo 3 meses de viaje, una diferencia notable.

Sin embargo, tendremos que esperar a futuros desarrollos de esta investigación con la esperanza de que los investigadores puedan crear un motor de propulsión térmica nuclear válido.