¿Cómo será el chocolate del futuro? Se buscan alternativas sustentables por el alto precio del cacao
El elevado costo de los granos de cacao ha impulsado las investigaciones de la industria para encontrar un sustituto. Conoce cómo se producen los nuevos sabores que prometen ser tan deliciosos como los del cacao.
Según estadísticas publicadas por la Organización Internacional del Cacao (ICCO por sus siglas en inglés), desde mediados de julio del pasado año el mercado del cacao ha mostrado un sostenido incremento del precio de la tonelada, que se comercializaba en poco más de 3.300 USD, hasta alcanzar al cierre del 10 de julio de 2024 la cifra de 7.207 USD/Ton. Esto representa un incremento de cerca del 116 % anual del valor del cacao en el mercado internacional durante el último año, cuando alcanzó el precio récord de 9.717 USD/Ton en abril.
El cacao es una de las materias primas que, aunque su producción a nivel global está en el orden de 5.000 millones de toneladas al año, tiene grandes implicaciones en la industria chocolatera y el mercado minorista de dulces y alimentos.
El 60% de la producción mundial de cacao proviene de África, siendo Costa de Marfil y Ghana los responsables del mayor volumen. El resto se cosecha en naciones de América y Asia, siendo Brasil e Indonesia los mayores productores en sus respectivas regiones.
La crisis climática, que ha causado pérdida de cultivos y bajos rendimientos, además de las cada vez más estrictas (y justas) regulaciones gubernamentales sobre la deforestación y el trabajo infantil en las naciones importadoras del cacao, han causado la disminución de la producción con el consecuente déficit de suministro y el aumento de sus precios.
¿Un chocolate sin cacao? El presente para una industria sustentable
El desafío de producir un chocolate con ingredientes que se cultiven en Europa que puedan reemplazar parcial o totalmente el cacao, ha sido el propósito de la compañía británica Nukoko, que basa su producción de chocolate en las habas.
Este año Nukoko tiene previsto procesar 740.000 toneladas de habas y vencer los obstáculos para su inserción en la industria chocolatera europea con su nueva materia prima.
Iniciativas en otros países
También en Alemania la empresa emergente ChoViva se ha dado a conocer como la primera productora de chocolate sin cacao, que emite a la atmósfera un 90% menos de gases contaminantes que en las producciones convencionales.
El producto de ChoViva se basa el procesamiento de avena y semillas de girasol, teniendo en cuenta resultados de investigaciones que apuntan a que el 80% del sabor del chocolate proviene de la fermentación y no del grano en sí mismo. En la actualidad ChoViva comercializa varios productos similares al chocolate, incluyendo una línea vegana.
Fermentation tech startup Planet A Foods, the parent company of cocoa-free chocolate ChoViva, secured $15.4M in Series A funding.
— Eshan | Better Bioeconomy (@biotecheshan) February 3, 2024
An independent LCA finds that the vegan version of ChoVivas chocolate can save up to 90% in emissions compared to conventional chocolate. pic.twitter.com/YrVXArpivg
También Italia, país con una fuerte tradición en la repostería y la chocolatería, ha apostado por sustituir al cacao con la algarroba, una legumbre que se cultiva al sur de Europa.
La empresa Foreverland ha creado varios productos 100% veganos que denomina comercialmente como Freecao, que van desde Huevos de Pascua a Panetones, que comercializan en línea. Aseguran que en la producción de este chocolate utilizan el 90% menos de agua y el 50% de azúcar que en las producciones basadas en cacao, y que reducen en un 80% las emisiones de contaminantes a la atmósfera.
El futuro del chocolate
Prestigiosas instituciones académicas como la Universidad de Harvard están desarrollando investigaciones para la obtención de una grasa que imita la manteca de cacao, a partir de la recuperación de gases de efecto invernadero tratados con microbios y electricidad (fermentación gaseosa). Promete ser una materia prima con la que se producirán diversos productos tan deliciosos como los que hasta hoy conocemos.
Pero los resultados están por llegar. De momento, estaría bien saborear un delicioso chocolate de cacao y dejarse seducir por las alternativas que están llegando de Europa.
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