¿Cuál es el papel de las nubes en el clima de la Tierra?
Una misión espacial conjunta europeo-japonesa tiene como objetivo resolver el enigma, que los científicos esperan ayude a las predicciones climáticas.
La mayoría de la gente probablemente no piensa mucho en las nubes, viéndolas simplemente como masas esponjosas en el cielo o como portadoras de lluvia.
Sin embargo, la ciencia de las nubes es muy compleja y relativamente poco conocida. Los meteorólogos saben que las nubes desempeñan un papel extremadamente importante en el calentamiento y enfriamiento de la atmósfera al reflejar la energía solar entrante hacia el espacio o atrapar la energía infrarroja saliente.
Pero el grado en que las nubes calientan o enfrían la Tierra depende de varios factores, entre ellos su forma, ubicación, altitud, contenido de agua y tamaño de partículas, lo que deja poco claros los detalles de su papel en el impulso del sistema climático.
De manera similar, los aerosoles (partículas diminutas como polvo y contaminantes suspendidos en la atmósfera terrestre) también desempeñan un papel importante en el sistema climático de la Tierra, tanto directamente al reflejar y absorber la radiación solar entrante y atrapar la radiación saliente, como indirectamente al actuar como núcleos para la formación de nubes.
Las actividades humanas, incluidos los procesos industriales, el transporte y la agricultura, están alterando significativamente las concentraciones de aerosoles en la atmósfera y, por lo tanto, impactando los patrones climáticos regionales.
Aunque se entiende que actualmente las nubes y los aerosoles enfrían el planeta en general, los cambios y los ciclos de retroalimentación provocados por la crisis climática podrían reducir su potencial para lograrlo y, en última instancia, empeorar el cambio climático.
En órbita
El satélite Earth Cloud Aerosol and Radiation Explorer (EarthCARE para abreviar) se lanzó al espacio a bordo de un cohete Falcon 9 desde California el 29 de mayo.
Lleva un conjunto de cuatro instrumentos de última generación. Un radar de perfilado de nubes proporcionará información sobre la estructura vertical y la velocidad del flujo ascendente y descendente dentro de las nubes (el primer radar del mundo capaz de hacerlo), mientras que un lidar atmosférico (como un radar, pero que utiliza luz de un láser) proporcionará perfiles de aerosoles y nubes delgadas, así como información sobre las cimas de las nubes.
También habrá un generador de imágenes multiespectral, que brindará una visión general de la escena en múltiples longitudes de onda, y un radiómetro de banda ancha para medir la radiación solar reflejada y la radiación infrarroja saliente proveniente de la Tierra.
Estos instrumentos trabajarán juntos para proporcionar una visión holística de la compleja interacción entre nubes, aerosoles y radiación.
Tiempo crítico
La nueva misión es una empresa conjunta entre la Agencia Espacial Europea (ESA) y la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial, JAXA.
La directora de programas de observación de la Tierra de la ESA, Simonetta Cheli, afirmó: “EarthCARE es la más compleja de las misiones de investigación de la ESA hasta la fecha. La misión llega en un momento crítico en el que avanzar en nuestro conocimiento científico es más importante que nunca para comprender y actuar sobre el cambio climático, y estamos ansiosos por recibir sus primeros datos".