El cultivo de arroz en África es una fuente importante de metano, advierten los expertos
En un escenario de creciente preocupación por las emisiones de metano, un estudio reciente revela que el cultivo de arroz en el África subsahariana, hasta hace poco subestimado, contribuye significativamente al aumento global de este gas de efecto invernadero.
En los últimos años, el continente africano ha sido identificado como uno de los impulsores del actual aumento de metano en la atmósfera, junto con las emisiones de los humedales y la ganadería. Un estudio publicado recientemente en Nature Climate Change reveló que el rápido aumento del cultivo de arroz también es una fuente importante de estas emisiones, que se estima que contribuyen en un 7% al actual aumento global de las emisiones de metano.
Esta evidencia genera preocupación sobre los objetivos de mitigación del cambio climático, especialmente dado el crecimiento continuo de la producción de arroz para alimentar a una población en rápido crecimiento.
El cultivo de arroz en África subsahariana se convierte en un activo importante para el aumento del metano
El metano (CH4) es un potente gas de efecto invernadero responsable de un aumento de 0,6°C en el calentamiento global desde la era preindustrial. Las principales fuentes antropogénicas de metano incluyen las cadenas de suministro de petróleo y gas, la minería del carbón, la ganadería, la gestión de residuos y el cultivo de arroz.
Si, por un lado, los humedales se reconocen como una fuente natural muy importante, por el otro, este estudio sugiere que las emisiones procedentes de la producción de arroz en el África subsahariana pueden ser un contribuyente importante —y hasta hace poco desconocido— a la tendencia al crecimiento del metano.
Sin embargo, análisis contrarios basados en observaciones de metano atmosférico indican que África es un importante impulsor del aumento actual de metano, anteriormente atribuido a los humedales o la ganadería. La expansión del cultivo de arroz en África, impulsada por la Coalición para el Desarrollo del Arroz en África (CARD), como respuesta a la crisis mundial de precios de los alimentos en 2007-2008, se ha convertido en una nueva preocupación en los últimos años.
La primera fase de CARD, que buscaba duplicar la producción de arroz entre 2008 y 2018, se logró con éxito, lo que resultó en un aumento del 68% en el área cultivada con arroz en África Subsahariana. Sin embargo, la segunda fase, que comenzó en 2019, busca volver a duplicar la producción de aquí a 2030, con el objetivo de alcanzar la autosuficiencia en arroz como parte de los alimentos básicos en nueve países participantes añadidos al programa.
Este crecimiento significativo en la producción de arroz, principalmente a través de la expansión de las áreas cultivadas, genera preocupación de que las emisiones de metano asociadas puedan comprometer los esfuerzos para cumplir los objetivos del Acuerdo Global sobre Metano de una reducción del 30% en las emisiones para 2030.
La presión sobre los objetivos globales de emisiones de metano podría intensificarse en los próximos años
Las estimaciones actuales de las emisiones de metano asociadas con el cultivo de arroz en el África subsahariana pueden estar subestimadas, ya que no tienen en cuenta la reciente expansión de la superficie cultivada ni los factores de emisión. El estudio también sugiere que las emisiones de metano del arroz en la región contribuyeron con el 31% de la tendencia reciente de las emisiones africanas y el 7% de la tendencia global de metano.
Ante este desafío de alimentar a una población en rápido crecimiento, se espera que la agresiva expansión e intensificación del cultivo de arroz continúe entre las políticas de autosuficiencia propugnadas en la última década y media. Obviamente, esto ejerce una presión adicional sobre la necesidad de reducir las emisiones de metano en otros sectores para cumplir los ambiciosos objetivos del Acuerdo Mundial sobre el Metano. El compromiso de reducir las emisiones de metano en un 30% para 2030 con respecto a los niveles de 2019 parece estar asociado a mayores desafíos dada la mayor demanda de arroz en este continente.
La comunidad global está buscando innumerables soluciones para enfrentar el cambio climático, y la búsqueda de prácticas agrícolas más sostenibles e innovación tecnológica puede desempeñar un papel crucial para reducir las emisiones y garantizar la seguridad alimentaria.
Referencia de la noticia:Chen, Z., Balasus, N., Lin, H., Nesser, H., & Jacob, D. J. African rice cultivation linked to rising methane. Nature Climate Change (2024). .