Esta es la cantidad de agua que los expertos recomiendan tomar al día: es diferente según la edad
La cantidad necesaria de líquidos que una persona debería beber a diario varía por diferentes factores, uno de ellos es la edad. Más allá de los ocho vasos al día hay otros datos que tomar en cuenta.
Debe ser uno de los consejos de salud más repetidos: es recomendable beber al menos ocho vasos de agua al día. Sin embargo, ¿cuál es la medida de un vaso estándar?, ¿es igual si eres una persona sedentaria o deportista?, ¿da lo mismo la edad?, ¿de dónde salió la idea de que esa es una cantidad saludable?
Hace más de veinte años, el fallecido profesor Heinz Vaitin, de la Universidad de Dartmouth, EE.UU., logró dar con el posible origen de la recomendación: en 1945, la Junta de Alimentos y Nutrición del Consejo Nacional de Investigación de EE.UU. señaló que la cantidad adecuada de agua para los adultos es de 2,5 litros diarios. La mayor parte encontrada en algunos alimentos preparados.
Pero en 1974, Fredrick J. Star, y Margaret McWilliams lo pusieron en términos de vasos: entre 6 y 8 cada 24 horas, que pueden ser café, té, leche, refrescos, cerveza, frutas y verduras, entre otros. Para ninguno de los casos existía evidencia científica y, sin embargo, la recomendación la han seguido repitiendo desde revistas a instituciones y médicos.
¿Cómo saber cuánta agua beber?
Juan Videla Alfaro, académico de la Facultad Enfermería de la Universidad Andrés Bello, explica que el cuerpo humano posee alrededor de 65% de agua, lo que varía según la edad. En los recién nacidos alcanza de 70 a 80% y va descendiendo con el crecimiento. “En un adulto de 70 kilos, 45,5 kilos de su peso es agua”, sostiene.
Esta agua es esencial para regular la temperatura corporal, mantener la piel hidratada, regular las funciones cerebrales, optimizar el funcionamiento renal y prevenir las infecciones del tracto urinario, entre otras. La cantidad necesaria depende de factores como la edad, el sexo y el peso corporal, además de ciertas circunstancias que inducen a consumir más agua para compensar las pérdidas, como el deporte, un día caluroso o patologías que provoquen fiebre, vómitos y diarrea.
Por lo mismo, no existe una solución única para todos, la ingesta de agua es individualizada y lo mejor es que sea un médico el que indique la cantidad adecuada para cada uno. No obstante, hay instituciones que entregan algunas recomendaciones generales.
Según el Instituto de Medicina de los Estados Unidos (IOM), los niños de 1 a 8 años deben beber de 1,3 a 1,7 litros por día; entre los 14 y 18 años, depende del sexo: 3,3 litros los hombres y 2,3 litros las mujeres (diferencia que se explica por el porcentaje de grasa corporal). En los mayores de 20 años llegaría a 3,7 litros y 2,7 litros por día, para hombres y mujeres, respectivamente.
Por otro lado, la Federación Española de Sociedades de Nutrición y Dietética (Fesnad), señala que entre los 0 y 6 meses, los bebés deberían beber 680 ml de agua al día; hasta el año, entre 800 ml y un litro; entre 1 y 2 años, de 1 litro a 1.200 ml; de 2 a 3 años, 1.300 ml; de 4 a 8 años, 1.600 ml; y de 9 a 13 años, 1.900 ml, en el caso de las niñas, y 2.100 ml, los niños.
Para los adultos, la recomendación de la Fesnad es de 2 litros para las mujeres y de 2,5 litros para los hombres. Pero en el embarazo debería ser 2.300 ml, y 2.700 ml durante la lactancia.
Es necesario tener especial cuidado con las personas mayores, ya que no sienten la sed como cuando eran más jóvenes, lo que podría ser un problema si están tomando algún medicamento que pueda provocar pérdida de líquidos, como un diurético.
¿Cuentan las bebidas y cervezas?
A diferencia de lo que se recomendaba en la década de los 70, los especialistas ya no aconsejan contar líquidos como el café, las gaseosas o bebidas alcohólicas dentro de la cantidad de agua que se debe beber al día.
“Para hidratarse lo más recomendable es el agua pura o infusiones. Es recomendable evitar la cerveza fría, pues contrario a lo que se piensa, aumenta la eliminación urinaria y, por ello, hay más deshidratación. Lo mismo ocurre con las bebidas azucaradas, el café y las bebidas isotónicas. Estas última solo se recomiendan a quienes realizan ejercicio extremo para la recuperación de electrolitos”, señala Videla Alfaro.
La Fesnad, agrega que es recomendable que el 80% de la ingesta diaria se obtenga del consumo de agua y el 20% de alimentos y otras bebidas.
Fuentes y referencias de la noticia:
- American Journal of Physiology
- Fesnad
- Harvard Health Publishing.