La historia del ampelis europeo, el pájaro que se emborracha comiendo bayas fermentadas
El ampelis europeo, que se alimentan en gran medida de estas bayas, a menudo terminan ingiriendo una cantidad significativa de alcohol. Aunque muchas de estas aves pueden soportar los efectos del alcohol sin problemas, otras no saben cuándo parar y quedan visiblemente borrachas.
El ampelis europeo, de nombre científico Bombycilla garrulus, es un ave paseriforme de aspecto regordete y redondeado, con cabeza cuadrada y pico rechoncho y cónico, además de cresta digitiforme eréctil. Las alas son puntiagudas, las patas cortas y la cola corta y cuadrada. La muda se produce una vez al año, entre agosto y enero.
El plumaje de aspecto sedoso característico es de color gris parduzco en todo el cuerpo, tendiendo al gris ceniza en la zona ventral y en la cola, con matices beige-canela en la cabeza y el pecho, mientras que el dorso y las alas son de color gris pardo oliva. La parte inferior es de un cálido color avellana.
Las características de la especie
El ampelis europeo tiene una longitud media de 18-20 cm y un peso de 50-60 gramos, mientras que la envergadura de las alas alcanza los 35 cm. Las alas se caracterizan por tener una forma larga y puntiaguda. Predominantemente grises, en el macho presentan rayas de vistosos colores en la parte terminal, especialmente en la parte más interna.
La cola, también gris, termina en una barra horizontal amarilla. La espalda y los hombros son de color marrón claro, mientras que la frente es leonada o naranja que se desvanece a marrón claro.
El pecho y el vientre varían de marrón a gris, mientras que la parte inferior de la cola es de color naranja. El pico, corto y puntiagudo, también es gris, pero con tonalidades más oscuras, y muestra dos manchas blancas a los lados.
Un comedor de frutas
Su dieta es mayoritariamente frugívora, con un componente insectívoro que se hace más significativo durante el verano, cuando la época de apareamiento provoca un aumento de las necesidades energéticas, alcanzando el 37% del total.
Buscan alimento entre las ramas de los árboles y entre las ramas de los arbustos, mientras que es raro observarlos en el suelo. Las presas vivas generalmente se capturan sobre la marcha. Pero la comida favorita del ampelis europeo está representada por bayas y frutos pequeños bien maduros y azucarados, especialmente bayas, pero también membrillos, espinos, enebros y escaramujos.
Los ampelis europeos son comedores prodigiosos: la cantidad diaria de bayas ingeridas equivale a más del doble del peso del ave. Se observó que un espécimen se alimentaba de entre 600 y 1000 bayas de membrillo en el transcurso de 6 horas, defecando aproximadamente cada cuatro minutos mientras tanto.
Una dieta muy azucarada provoca sed frecuente, por lo que el agua se obtiene de los charcos o comiendo nieve o bebiendo nieve derretida al borde de las carreteras. Esto a veces puede causar envenenamiento con la sal que dejan los esparcidores de sal.
¿Puede el ampelis europeo emborracharse comiendo bayas?
Durante el invierno, cuando cae la nieve, las frías temperaturas favorecen la fermentación de las bayas de serbal. Las bayas fermentan y producen alcohol. Los ampelis europeos, que se alimentan en gran medida de estas bayas, a menudo terminan ingiriendo una cantidad significativa de alcohol. Si bien muchas de estas aves pueden soportar los efectos del alcohol sin problemas, otras no saben cuándo parar y quedan visiblemente borrachas.
Este particular comportamiento de estas aves nos hace comprender cómo los ecosistemas de la Tierra son especialmente delicados y cómo los cambios ambientales producidos por el hombre pueden influir en el comportamiento animal.
Área de distribución
Estas aves anidan en los bosques de coníferas de Siberia y América del Norte. Cuando hay escasez de alimento, los ampelis europeos de pico blanco se desplazan en grandes bandadas hacia el sur, hasta llegar a las puertas del mar Mediterráneo.
La especie a veces se desplaza en grandes bandadas hacia el norte de Italia. Se trata de fenómenos ocasionales que afectan de forma más o menos masiva al norte de Italia, especialmente a Trentino-Alto-Adigio y Lombardía, cada 1-3 años, con grandes olas cada 10 años. En invierno también se le puede observar cerca de centros habitados, en busca de bayas de serbal, principal fuente de sustento en la estación fría.