Las 5 plantas más tóxicas de Chile, dónde se ubican y por qué son peligrosas

Chile sin duda alberga plantas fascinantes que van desde especies nativas hasta introducidas, sin embargo, algunas de ellas podrían resultar altamente tóxicas para las personas.

Plantas toxicas
Aprender a reconocer las plantas tóxicas es vital para evitar accidentes, especialmente si tienes niños o mascotas.

En el vasto paisaje chileno, donde la naturaleza deslumbra con su diversidad y belleza, también se esconden plantas que pueden ser un verdadero peligro. Estas especies, algunas nativas y otras introducidas, han sido parte del folclore y la cultura local, protagonizando historias de advertencia que han pasado de generación en generación.

Sin embargo, ¿sabías que muchas de ellas pueden estar más cerca de lo que imaginas, incluso en jardines o espacios públicos?

Belladona (Atropa belladonna)

La belladona, aunque es originaria de Europa y Asia Occidental, se puede hallar en jardines o áreas boscosas de la zona central de Chile, donde crece de forma silvestre.

Belladonna
Las atractivas bayas de la belladona esconden un peligro mortal para humanos y animales.

Su toxicidad proviene de alcaloides como la atropina, la escopolamina y la hiosciamina, que actúan como potentes inhibidores del sistema nervioso parasimpático.

En pequeñas dosis, se utilizó históricamente como un cosmético para dilatar las pupilas y realzar la belleza de las mujeres, de ahí su nombre.

Sin embargo, una dosis más alta puede provocar síntomas como sequedad en la boca, visión borrosa, taquicardia, alucinaciones e incluso un coma. En Chile, se han reportado casos de intoxicación accidental debido a la ingesta de sus atractivos frutos, que asemejan pequeñas cerezas negras.

Floripondio (Brugmansia arborea)

El floripondio es originario de América del Sur y comúnmente cultivado como ornamental en jardines de todo el país.

Floripondio
El floripondio adorna muchos jardines, pero su toxicidad lo convierte en una planta que merece respeto y cuidado.

Esta planta contiene alcaloides tropánicos como la escopolamina, la atropina y la hiosciamina, sustancias con potentes efectos neurotóxicos. Estos compuestos pueden causar desde alucinaciones severas hasta parálisis o incluso la muerte si se ingiere en cantidades elevadas.

En medicina, algunas de sus sustancias se han utilizado bajo estricta supervisión para tratar condiciones, como el mareo por movimiento o los espasmos musculares. Sin embargo, su uso indebido ha sido reportado en casos de intoxicación accidental y, más preocupantemente, en incidentes delictivos, ya que puede inducir estados de sugestión extrema.

Cicuta (Conium maculatum)

Cicuta
Esta planta es responsable de múltiples casos de intoxicación cada año, siendo especialmente peligrosa cuando se consume accidentalmente por su apariencia inofensiva.

La cicuta, conocida históricamente por ser el veneno usado en la ejecución de Sócrates, es una de las plantas más peligrosas que crecen en Chile. Esta especie se encuentra principalmente en terrenos húmedos, bordes de caminos y campos abandonados, desde la región de Coquimbo hasta Los Lagos.

A simple vista, podría confundirse con el perejil debido a sus hojas compuestas y aromáticas, lo que la convierte en un riesgo significativo, especialmente para niños y animales.

La toxicidad de la cicuta radica en su contenido de alcaloides como la coniina, que afecta el sistema nervioso central. Ingerir incluso pequeñas cantidades puede provocar vómitos, debilidad muscular y, en casos graves, parálisis respiratoria.

Oleandro (Nerium oleander)

El oleandro, si bien, es originario del Mediterráneo y Asia, es una planta ornamental ampliamente cultivada en jardines y espacios públicos de Chile.

Oleandro
El oleandro, un arbusto ornamental muy común, es también una de las plantas más tóxicas que existen, especialmente por sus hojas y flores.

Cada parte de esta planta, desde sus hojas hasta sus semillas, contienen glucósidos cardíacos como la oleandrina y la neriantina, sustancias que pueden afectar severamente el ritmo cardíaco, provocando desde arritmias hasta un paro cardíaco.

Su toxicidad no disminuye al secarse, lo que lo convierte en un peligro latente si se utiliza como leña o para hacer infusiones, incluso el humo de su combustión puede ser nocivo para la salud.

Casos de intoxicación suelen reportarse en niños y mascotas que consumen partes de la planta por curiosidad. Además, el contacto con su savia puede causar irritaciones en la piel.

Dedalera (Digitalis purpurea)

La dedalera es una planta originaria de Europa, pero que se ha naturalizado en Chile. Suele encontrarse en regiones del sur, especialmente entre La Araucanía y Los Lagos.

Dedalera
La dedalera, con sus llamativas flores en forma de campana, esconde un potente veneno utilizado en medicina bajo estrictos controles, pero mortal en dosis inadecuadas.

La dedalera, es una planta ornamental muy llamativa por sus flores tubulares de colores vibrantes, pero extremadamente peligrosa. Todas sus partes contienen glucósidos cardíacos como la digitoxina, que afectan directamente el ritmo del corazón. Ingerir esta planta, incluso en pequeñas cantidades, puede causar náuseas, vómitos, alteraciones cardíacas y, en casos graves, la muerte.

En Chile, es común encontrarla en jardines y zonas montañosas. Aunque tiene usos medicinales en cardiología, solo debe manipularse bajo estricta supervisión médica debido a su toxicidad.

Fuentes y referencias de la noticia:

- Listado de plantas tóxicas para Chile. Ministerio de Salud, Gobierno de Chile. (2024).