Los investigadores destacan por qué el tiempo lo es todo cuando se trata del aprendizaje y el desarrollo infantil
Las investigaciones sugieren que todo se reduce a la sincronización de las respuestas vocales y no importa quién o qué interactúa con ellos, ¡incluso un automóvil a control remoto que habla!
Los investigadores de la Universidad de Cornell pusieron a prueba la capacidad de los bebés para aprender y desarrollarse comunicativamente a través de vocalizaciones contingentes. Los investigadores descubrieron que el aprendizaje infantil estaba influenciado notablemente por vocalizaciones contingentes (cuando las vocalizaciones se emitían en respuesta inmediata a los bebés o dentro de una "proximidad temporal cercana") de un compañero social no humano ( un automóvil controlado a distancia ) y compañeros sociales no biológicos.
Configuración experimental
Sesenta y cuatro bebés (de entre 7 y 8 meses de edad) participaron en el estudio; un grupo fue sometido a respuestas contingentes de un automóvil a control remoto y otro grupo recibió respuestas contingentes de un compañero social no biológico. Se ordenó al vehículo que se moviera hacia los bebés (dentro de los 3 segundos de las vocalizaciones no relacionadas con el llanto de los bebés) y que emitiera un sonido vocálico en respuesta.
Los compañeros sociales no biológicos se inclinarían, tocarían a los bebés en el hombro y sonreirían dentro de la misma ventana asignada de 3 segundos. En otros grupos de bebés se implementó el control mediante yugo , en el que el vehículo o la persona respondían a las vocalizaciones en un horario aleatorio.
Independientemente de si el interlocutor social en el experimento era una entidad no biológica (un coche teledirigido) o una persona, los bebés mostraron una mayor capacidad vocal hacia estos agentes interactivos que hacia su cuidador si recibían respuestas contingentes en lugar de respuestas con yema .
Esta observación sugiere que los bebés, mientras se encuentran en las primeras etapas del desarrollo lingüístico y social , son muy plásticos en su aprendizaje sin importar con quién o con qué interactúan .
Implicaciones del estudio
El profesor de Psicología, Michael Goldstein, dice que la investigación revierte creencias previamente sostenidas sobre el aprendizaje y el desarrollo infantil, es decir, que los bebés aprenden mediante mecanismos genéticos preestablecidos (como el reconocimiento facial).
"Lo que está innato en el bebé es prestar atención al ritmo, y el mundo se encarga del resto. Los bebés son máquinas de aprendizaje y los adultos deben responder de la manera correcta para impulsar ese aprendizaje", afirmó Goldstein.
Los hallazgos de este estudio implican que los bebés responden muy bien a escenarios predecibles y participativos. Incluso con elementos no humanos como un coche de juguete a control remoto, los bebés mostraron una mayor participación cuando sus vocalizaciones fueron recompensadas con reacciones contingentes.
Este comportamiento implica que el aprendizaje y las habilidades interpersonales se refuerzan a través de interacciones contingentes . Las terapias personalizadas con respuestas contingentes pueden mejorar el desarrollo social y lingüístico de los niños autistas , que podrían preferir entornos más predecibles .
Referencia de noticias
Venditti, JA, Elkin, R., Williams, RM, et al. La contingencia permite la formación de expectativas sociales sobre un agente artificial . Infancia (2024)