¡Más chileno que los porotos! Ricos, nutritivos y versátiles en nuestra cocina tradicional
Con riendas, granados, en ensaladas y más. Conoce los incomparables beneficios de estas legumbres, el hábito de consumo en Chile y algunas recetas tentadoras que desafían tu ingenio y paladar para estos días otoñales.
¿Qué hay para almorzar hoy? ¡Porotos! A quién no le pasó durante la niñez que, al escuchar este plato tradicional, sentía cierto rechazo. Sin embargo, y para que estemos en conocimiento de la verdad sobre estas legumbres, los porotos son ricos en minerales, vitaminas y proteínas.
Como si fuera poco ¡son bajos en grasas! Si padeces de colesterol alto, esto te va a interesar, ya que son una fuente primordial de fibra, tanto soluble como insoluble. Por lo tanto, ayudan a mantener saludables los niveles de glucosa en la sangre.
| Compuesto nutricional | Proporción (%) |
|---|---|
| Proteínas | 25 |
| Carbohidratos | 60 |
| Lípidos | 2 |
| Otros | 13 |
| Composición nutricional del poroto. Fuente: Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA). | |
Además, el consumo regular de los porotos te ayudarán a prevenir enfermedades degenerativas y crónicas como la diabetes, el cáncer y la obesidad. Este es un dato relevante en Chile, ya que 1 de cada 10 personas está dignosticada con diabetes y 1 de cada 4 niños o niñas padece de obesidad.
Consumo de porotos en Chile
El Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) contó con el proyecto Porotos chilenos entre los años 2017 y 2018 —cuyo objetivo fue "promover el consumo e incentivar a diversificar los formatos de comercialización del poroto chileno, a través de la generación de información nutricional— sugerencias de uso y preparaciones culinarias de diferentes variedades".
En los últimos 15 años, el consumo de porotos en Chile ha presentado una disminución considerable, debido al incremento del ingreso per cápita del país, lo que ha provocado que sustituyamos las proteínas vegetales por las proteínas animales.
Desde INIA mencionan que "además de los beneficios para la salud, el cultivo de porotos puede ayudar a diminuir la pobreza, mejorar la calidad de vida de los productores, reducir la huella de carbono y enriquecer los suelos agrícolas". A pesar de ello, en los últimos 40 años, el cultivo y consumo del poroto ha disminuido hasta en un 90% en nuestro país.
Recetas tentadoras con porotos para tu paladar
Prejuiciosamente, los porotos y otras legumbres tienen un prestigio social bajo en Chile. La disminución de su consumo también se asocia al alza en los precios y al tiempo de preparación. Pero, aquí te presentamos algunas recetas que pueden transformarse en exquisiteces si le das una vuelta a la creencias que traías de los porotos.
Pastel de porotos blancos
Para esta receta necesitas 1 kg de poroto español, 125 gr de mantequilla, 150 gr de aceitunas descarozadas, 250 gr de queso mantecoso y 1 cebolla grande cortada en pluma. Ahora, tienes que cocer los porotos para, posteriormente, formar un puré y pasarlos por cedazo.
En un sartén, sofreír la cebolla y condimentar a gusto. Luego, hay que enmantequillar una fuente (ojalá de greda), para esparcir una capa del puré de porotos, encima una capa del sofrito de cebollas, esparcir el queso mantecoso y decorar con las aceitunas.
Entre las capas, colocar trocitos de mantequilla para agregar más sabor. Finalmente, llevar a horno precalentado hasta que todo se gratine, por unos 15 a 20 minutos dependiendo de tu horno. Servir y disfrutar.
Mayonesa de porotos blancos
Lo que requieres para esta mayonesa es 1 taza de porotos blancos cocidos y su líquido, 250 cc de aceite de maravilla, 1 cucharada de jugo de limón, 1 cucharadita de sal y 1 cucharadita de tahine (pasta de sésamo).
Ahora, toma tu licuadora y agrega los porotos cocidos con su líquido, más el jugo de limón, sal y el tahine. Incorporar poco a poco el aceite (como se hace en la mayonesa tradicional) hasta dar con la consistencia ideal. Acompañar con algo que te guste como bastones de vegetales, tostadas con orégano o tu apetizer favorito. Recuerda que para ser un país sostenible, nuestra alimentación también debe ser reflejo de ello.