Mujeres que observan el cielo: miradas distantes

Grandes físicos, astrónomos, investigadores del tiempo y el clima han marcado con su obra un antes y un después en la historia universal. Aún es insuficiente lo que se hace por destacar el papel de la mujer en estos ámbitos de la ciencia, teniendo en cuenta la relevancia de sus aportes. En la actualidad las mujeres rebasan la exósfera, exploran el espacio profundo y crean modelos climáticos; aún así, falta camino por recorrer para su pleno reconocimiento.

Visión femenina de la tierra y la atmósfera

Las mujeres siempre han tenido un estrecho vínculo con la tierra: su conexión y gestión cuidadosa nos brinda conocimientos ancestrales. Tienen una visión única de las técnicas de cultivo y la adaptación a las variaciones del tiempo y el clima. Quizás de esta relación hayan nacido científicas con don en el estudio de la atmósfera.

Eunice Foote fue la científica climatológica estadounidense que descubrió en 1856 el efecto invernadero. Sin embargo, el crédito de este hallazgo se lo llevó el físico John Tyndall, tres años después que la científica concluyera que el dióxido de carbono imprimía calor adicional a nuestra atmósfera. En tiempos donde era mal visto que una mujer se licenciara, Joanne Simpson fue la primera en obtener un título en Meteorología, en 1949. En el ámbito laboral nunca cedió su puesto a ningún hombre.

Años después, la argentina Eugenia Kalnay rompió barreras al ser la primera mujer en conseguir un doctorado en Meteorología. Trabajó para la NASA donde desarrolló un modelo global de clima, que aún es usado para hacer experimentos mundiales. En 2009 Kalnay fue elegida como la mejor meteoróloga del mundo por la Organización Meteorológica Mundial.

Observación del espacio por mujeres

Hace un mes fue otorgado el Premio Nobel de Física a la astrónoma estadounidense Andrea Ghez por creer en un experimento que nadie pensó que funcionaría. A pesar de esto, ella insistió en hacerlo, resultando la evidencia concluyente de un agujero negro supermasivo en el núcleo de la Vía Láctea.

Se considera que las mujeres fueron las primeras astrónomas de la prehistoria: calculaban los ciclos menstruales con la luna y las cosechas a través de la observación estelar.

En el siglo IV existió una mujer que abrió el ciclo de grandes exploradoras del espacio: Hispatia de Alejandría. Fue una matemática, astrónoma y filósofa griega, que enseñó, mejoró el diseño de los astrolabios e inventó el hidrómetro. Brutalmente asesinada al ser tildada de hechicera, por aquellos que no comprendían la genialidad femenina.

Entre tantas mujeres que destacaron en la astronomía, resalta Henrietta Swan, que marcó pauta para poder hacer mediciones del universo y las galaxias. También fue notable la labor de Vera Cooper, pionera en la medición de la rotación de las estrellas dentro de una galaxia. Sus mediciones fueron evidencia de la existencia de la materia oscura.

“Pequeño paso para la mujer, un gran paso para todas”

En junio de 1963 la paracaidista profesional rusa Valentina Tereshkova se convirtió en la primera mujer en salir al espacio exterior. Veinte años después la astronauta estadounidense Sally Ride fue la primera de su país en sobrepasar la atmósfera. Jessica Meier y Cristina Kosh en octubre del pasado año realizaron la primera caminata espacial protagonizada solo por mujeres y para 2024 el proyecto Artemis de la NASA llevará a la Luna a la primera mujer en la historia para realizar exploraciones en su superficie.

Las mujeres pasan grandes dificultades, incluso en el espacio, donde se ve afectada su salud por la exposición a la radiación cósmica, siendo más propensa que los hombres al cáncer. A su regreso, presentan problemas en la presión arterial y es común que se desmayen. Nada de esto detiene la fortaleza de las mujeres que quieren ir siempre más allá de los "límites".