Desafío NASA: US$ 1 millón por sistema para alimentar astronautas
Iniciando el año, la NASA lanza la segunda etapa del concurso “Deep Space Food Challenge”. Este programa se ideó para crear sistemas innovadores y sostenibles de producción de alimentos que ayuden a los astronautas de Marte a alimentarse adecuadamente durante su estadía. ¿Quieres saber más?
Mientras se preparan los futuros astronautas que pisarán suelo marciano, la NASA convoca a innovar en sistemas que permitan elaborar comidas nutritivas, gustosas y que además creen un mínimo de desechos para viajes de larga duración hacia el espacio profundo. La agencia ofrece hasta 1 millón de dólares a quienes logren cumplir este desafío que permitirá ampliar los límites de la tecnología alimentaria. El premio monetario iría sólo a los participantes estadounidenses y se le otorgarán reconocimientos a los internacionales.
Si se logra este objetivo, no sólo se estaría incursionando en alimentos preservables en el espacio. La inseguridad alimentaria es un problema crónico en muchas partes del mundo y este programa podría tener aplicaciones en la producción local de alimentos en el hogar y en la comunidad, brindando nuevas soluciones para respuestas humanitarias a inundaciones y sequías, y nuevas tecnologías para un despliegue rápido después de desastres, explica la NASA.
En octubre de 2021, se realizó una primera fase del concurso que consistió en presentar diseños de alimentos con una gran variedad. Los equipos, en esa ocasión, propusieron tecnologías para producir alimentos listos para el consumo, además de polvos deshidratados que podrían transformarse en comidas. Otras innovaciones se enfocaron en cultivos de plantas y hongos o alimentos diseñados como células de carne cultivadas. Fueron 18 equipos los ganadores de esta etapa, llevando a casa un total de $450,000 por sus aportes tecnológicos.
Para esta segunda fase, se pide crear una tecnología para integrar en el sistema alimentario completo de una tripulación de cuatro personas en una misión espacial de tres años. La NASA aclara que este sistema debe considerar todo lo necesario para almacenar, preparar y entregar alimentos a la tripulación, incluida la producción, el procesamiento, el transporte, el consumo y la eliminación de desechos. La convocatoria del concurso abrió este 20 de enero y cerrará el 28 de febrero de 2022. Si eres uno de los aspirantes a participar en este gran desafío, aquí encontrarás las bases del concurso.
Así convoca la NASA cada año a sus desafíos
El programa de Desafíos del Centenario de la NASA se creó con el propósito de involucrar directamente al público en el proceso de desarrollo de tecnología avanzada. Ofrece premios de incentivo para generar ideas revolucionarias que ayuden a solucionar problemas de interés de la NASA. De esta forma se estimula la innovación en desarrollo de tecnologías y demostración de prototipos con potencial de aplicación en misiones espaciales y aeronáuticas.
Uno de los concursos propuestos por el programa fue el desafío del hábitat impreso en 3D, que consistió en construir un hábitat impreso en 3D para la exploración del espacio profundo, incluido el viaje de la agencia a la Luna, Marte o más allá. Otro importante desafío fue el de Cube Quest, concluido en 2020, cuyo objetivo era diseñar, construir y entregar pequeños satélites capaces de volar y realizar operaciones avanzadas cerca y más allá de la luna.
La agencia también promueve NASA Solve, otra iniciativa para participar en actividades de ciencia ciudadana y desarrollar soluciones. El desafío más reciente es en efecto el del sistema alimentario en el espacio profundo y otros anteriores son Break the Ice Lunar y TechRise student. El primero incentiva nuevos enfoques para excavar los recursos que los astronautas necesitarán durante las misiones de larga duración en la Luna, como el agua. Y el segundo fue un concurso tecnológico para motivar a los futuros profesionales de las ciencia a incursionar en el diseño, construcción y lanzamiento de experimentos en vehículos suborbitales.
Todo por un futuro donde las invenciones tecnológicas sean de provecho no sólo en exploraciones espaciales, sino también en la Tierra.