Nueva especie de dinosaurio identificada al norte de Chile
Recientemente se publicaron en la revista científica Cretaceous Research los resultados de una investigación que han desarrollado expertos chilenos por más de 30 años. Los restos encontrados en el desierto de Atacama se han identificado como pertenecientes a una nueva especie de dinosaurio.
El pasado lunes (19) se dio a conocer que un grupo de científicos liderado por geólogo chileno Carlos Arévalo concluían que los restos desenterrados en el desierto de Atacama en la década de 1990, y estudiados desde entonces, pertenecieron a un titanosaurio herbívoro, de espalda plana y una pequeña cabeza apoyada en un largo cuello. El desierto más seco del mundo en la actualidad, fue el hábitat de esta especie, cuando era un lugar húmedo y de temperaturas promedio 24 °C, ocupado por exuberante vegetación de palmeras, helechos y flores.
El análisis de los fragmentos del húmero, fémur, vértebras del cuello y espalda, permitieron concluir que el Arackar licanantay (que significa “osamentas atacameñas” en la lengua indígena Kunzi), como se ha nombrado esta nueva especie, era un saurópodo de unos 6,3 metros de largo.
Los titanosaurios constituyen un alto número de las especies prehistóricas identificadas en Sudamérica, en particular en Argentina y Brasil, pero en la región occidental de la Cordillera de Los Andes, y en territorio de Chile en particular, el Arackar licanantay es el tercer dinosaurio identificado.
De las 80 especies de dinosaurios que se conocen en el mundo, 55 provienen de América del Sur, y su supervivencia hasta hace unos 100 millones de años se atribuye a que en el Cretácico Tardío este continente permaneció aislado.
Pero no ha sido el primero…
En la vasta geografía chilena se han establecido varios puntos de exploración, y en particular en la costa de la Región del Bíobío se han obtenido interesantes resultados. Fue allí donde los fósiles de reptiles marinos identificados permitieron en el 2018, la primera descripción del Aristonectes quiriquinensis, uno de los plesirosaurios más grandes que existieron, de unos 2 metros de longitud, con extremidades de 3 metros y finos dientes que funcionaban como filtros de organismos pequeños. También en este sector se hallaron por primera vez en Chile restos fósiles de un halisaurio, muy parecido a un lagarto marino de cerca de 4 metros de largo.
En 2004 en Aysén se declaró el descubrimiento del Chilesaurio, un terópodo herbívoro, más pequeño que un velociraptor, que revolucionó la paleontología internacional al representar un gran enigma evolutivo a estudiar. Este descubrimiento atrajo la atención de reconocidos investigadores, y ha abierto desde entonces a los paleontólogos chilenos, las puertas de las instituciones más avanzadas del mundo en el tema.
Prestigiosas revistas científicas internacionales divulgan cada año los resultados de las investigaciones de instituciones del país como la Universidad de Chile, el Museo de Historia Natural y el Instituto Antártico Chileno.
A este apasionante mundo de las enormes criaturas que poblaron nuestro Planeta, y que más de un cineasta en Hollywood ha recreado en inolvidables películas, los científicos chilenos continúan dedicando esfuerzos, para aportar cada día más luz sobre nuestro pasado, y por qué no, para reflexionar sobre el futuro.