Olas de calor marinas: ¿qué son y cómo impactan los océanos?
Desde el año pasado, se viene observando un calentamiento anómalo en franjas de los océanos del mundo. De hecho, se han experimentado olas de calor marinas extremas, causadas por el cambio climático y por el reciente fenómeno de El Niño.
¡Es un hecho: los océanos están sufriendo cambios anómalos en su temperatura y esto traería serias consecuencias para el gran ecosistema que los compone! Se estima que desde 1982 se han duplicado los episodios de calentamiento oceánico, presentándose eventos extremos en el Atlántico Norte, la Antártida y alrededor del Mediterráneo.
En efecto, el pasado año se alcanzaron temperaturas récords en el Mediterráneo, valores que superaron todos los registros anteriores. Los científicos asociaron este evento extremo a una ola de calor marina que, fortalecida por el fenómeno de El Niño, incidió en varias áreas oceánicas a lo largo del 2023.
En estos momentos se sigue observando un calentamiento anómalo en un 78% los océanos del mundo, según aclara el meteorólogo Ben Noll en un post de la red social X. Con recientes mapas de olas de calor marinas de la NOAA, se pueden distinguir pozas de agua cálida cercanas al Reino Unido o al suroeste de España, aunque la atención gira más en torno al evento en el Mediterráneo y el Mar Negro.
¿Las causas de esta ola de calor marina? Si tenemos en cuenta que la acción humana contribuye en gran parte a los altos niveles de concentración de gases de efecto invernadero y que los océanos absorben más del 90 % del calor adicional resultante de estos gases, debemos atribuir la causa principal de este calentamiento anómalo al cambio climático antropogénico.
Así son las olas de calor marinas
Antes de entender cómo nos podría afectar este fenómeno, exploremos en qué consiste una ola de calor marina. La NOAA las define como "períodos de temperaturas oceánicas persistentes y cálidas, que pueden tener impactos significativos en la vida marina, así como en las comunidades y economías costeras".
A diferencia de las olas de calor terrestres –significativamente más conocidas por todos– las olas de calor marinas pueden durar muchas semanas o meses. Incluso, este calentamiento anómalo se extiende por mayores áreas y puede llegar a profundidades de cientos de metros.
¿Por qué nos preocupan?
A finales de 2013, en el Golfo de Alaska se registraba por primera vez un calentamiento anómalo que indujo a una serie de consecuencias fatales en los meses sucesivos. Una gran mancha cálida –causada por olas de calor marinas– se extendió unos 3200 kilómetros desde Alaska hasta México. En el transcurso de tres años, la mancha puso en peligro el ecosistema del Pacífico Norte.
El Centro Nacional de Oceanografía del Reino Unido (NOC, por sus siglas en inglés) señala cuáles son algunos de los daños causados por las olas de calor marinas: blanqueamiento de corales, floraciones dañinas de algas, muerte de algas marinas, enfermedades y mortalidad en invertebrados, y cambios de ubicación en las especies de peces.
Actualmente, las olas de calor marinas se pueden monitorear. En este caso, la NOAA se encarga de poner a disposición del público mapas interactivos para su observación y predicción, lo que sirve para hacer seguimiento y reducir los posibles impactos económicos y ecológicos.