¿Por qué es peligroso beber alcohol durante un vuelo en avión? Esto descubrió un nuevo estudio

El trabajo es el primero en investigar el impacto combinado de la hipoxia hipobárica y el alcohol durante el sueño. Los investigadores instan a los viajeros a ser más cautelosos.

Avión vuelo volar alcohol
En altitudes más altas, con oxígeno escaso, los niveles de oxígeno en sangre (SpO2) comienzan a disminuir. Crédito: Gettyimages.ru

Ingerir un poco de alcohol en un vuelo largo en avión siempre puede resultar tentador para amenizar el momento, pero los resultados de un nuevo estudio científico pueden hacernos cambiar de idea a partir de ahora.

Un equipo del Instituto de Medicina Aeroespacial del Centro Aeroespacial Alemán dividió a 40 voluntarios en dos cámaras de laboratorio del sueño: una con una presión normal a nivel del suelo y otra con una presión diseñada artificialmente para imitar un avión que navega a 2.438 metros (alrededor de 8.000 pies).

En altitudes más altas, con oxígeno escaso, los niveles de oxígeno en sangre (SpO2) comienzan a disminuir, lo que técnicamente se conoce como hipoxia hipobárica. Lo que muestra la nueva investigación es que, junto con el alcohol y una siesta, es una combinación potencialmente peligrosa, que podría estar ejerciendo una presión adicional sobre el corazón.

"Este estudio es el primero en investigar el impacto combinado de la hipoxia hipobárica y el alcohol durante el sueño", escriben los investigadores en su artículo publicado. "Demostramos que el consumo de alcohol a bordo es un riesgo para la salud subestimado que podría evitarse fácilmente".

¿Qué encontró el nuevo estudio sobre la ingesta de alcohol en vuelo?

De acuerdo a lo indicado por Science Alert, el estudio trabajó sobre cuatro grupos: los que dormían a presión normal con o sin bebida, y los que dormían a presión de cabina con o sin bebida.

Avión vuelo volar alcohol
Una SpO2 baja y una frecuencia cardíaca alta ejercen una presión adicional sobre el sistema cardiovascular. Crédito: blog.klm.com

El alcohol que se les dio a los participantes fue el equivalente a dos latas de cerveza o dos copas de vino. Durante los experimentos, los participantes se limitaron a dormir cuatro horas por noche, presumiblemente para imitar la experiencia del sueño interrumpido durante los vuelos.

A presión normal, el individuo promedio que consumía alcohol tenía un nivel de oxígeno en sangre del 94,97 % y una frecuencia cardíaca de 76,97 pulsaciones por minuto (ppm). Aquellos que no consumieron alcohol a presión normal tuvieron un nivel de oxígeno en sangre del 95,88 % y 63,74 ppm. A presión reducida, las estadísticas equivalentes fueron 85,32 % de SpO2 y 87,73 ppm para los bebedores, y 88,07 % de SpO2 y 72,90 ppm para los no bebedores.

En resumen, los hallazgos sugieren que en las condiciones de la cabina del avión, el oxígeno en sangre era menor y la frecuencia cardíaca mayor que en el grupo de control, y esos impactos fueron aún mayores entre quienes consumían alcohol.

Una SpO 2 baja y una frecuencia cardíaca alta ejercen una presión adicional sobre el sistema cardiovascular, y la preocupación es que nuestros hábitos de vuelo de larga distancia estén aumentando innecesariamente el riesgo de problemas cardíacos, especialmente para aquellos con enfermedades existentes.

Investigadores instan a los viajeros a ser más cautelosos

El estudio tuvo un tamaño de muestra muy pequeño y todos los participantes eran personas jóvenes y sanas. El cambio en las estadísticas de las personas mayores y más vulnerables podría ser aún más pronunciado, algo que se puede analizar en futuras investigaciones.

Por supuesto, es tentador tomar una pequeña copa y dormir una siesta cuando se va de vacaciones (o cuando regresa a casa después de un viaje de negocios estresante), pero los investigadores instan a los viajeros a ser más cautelosos en el futuro.

"Se debe aumentar la conciencia pública sobre este tema a través de organizaciones benéficas para pacientes, campañas públicas y consejos de salud escritos por parte de las aerolíneas", escriben los investigadores. "Las limitaciones técnicas y económicas hacen poco probable que las aerolíneas implementen un aumento de la presión en la cabina".


Referencia de la noticia:

Trammer RA, Rooney D, Benderoth S, et al. Effects of moderate alcohol consumption and hypobaric hypoxia: implications for passengers’ sleep, oxygen saturation and heart rate on long-haul flights. Thorax Published Online First: 03 June 2024. doi: 10.1136/thorax-2023-220998