¿Qué hay detrás de los 1,5°C de calentamiento global?
La temperatura global está rompiendo récords casi todos los meses. Pero estos récords dependerán fuertemente de lo que se haya medido.
Hace unos días nos enterábamos que la temperatura global del planeta superaba los 1,5°C de anomalía. Otro hito en esta secuencia de récords rotos desde el comienzo del extraordinariamente cálido 2023. Sin embargo, para llegar a entender cabalmente lo que significa este nuevo récord hay que repasar algunos conceptos.
Es una cosa de periodos
Lo que se superó por primera vez, desde que se tienen mediciones, es que durante un año completo la temperatura superó 1,5°C de calentamiento. Esto se obtiene calculando lo que llamamos promedio móvil; en este caso, el promedio móvil de 365 días. Este tipo de promedios, nos ayuda a mirar cambios suaves.
Es sabido que durante 2023 hubo días extremadamente cálidos, pero eso no significa que todos los días de 2023 superaron los 1,5°C. Lo que sí es cierto, es que 2023 consiguió el récord de cantidad de días con una anomalía superior a los 1,5°C. De ahí que no sorprende el hecho de que el promedio móvil de 365 días —que de alguna forma resume esta información— también lo haya superado.
Durante 2023 también se superó por primera vez el umbral de los 2°C. Pero en algunos días puntuales. Esos días puntuales no son comparables que esta nueva marca, porque uno da cuenta de lo que sucede en un día, mientras que el otro lo que sucede en un conjunto de 365 días.
Entonces, ¿cuál es marca es la que nos importa? Todas nos importan, porque dan cuenta de cambios en diferentes escalas de tiempo. Si queremos alargar aún más la mirada, podemos mirar el calentamiento en los últimos 30 años.
Si se considera la tendencia de calentamiento de los últimos 30 años, el calentamiento alcanza 1,26°C. Con esta misma tasa, los 1,5°C se alcanzarían en septiembre de 2033. Ese es el valor que importa para efectos del Acuerdo de París, por ejemplo. Sin embargo, que se alcancen los 1,5°C en 2033 dependerá de muchas cosas y es sólo una estimación muy simplificada.
El periodo de referencia también importa
Las anomalías son, en este contexto, diferencias entre los valores actuales y valores de referencia. En clima, ese periodo de referencia suele ser un periodo que consideremos representativo y que tenga un largo idealmente de 30 años o más.
Para monitoreo climático, como el que hacen todos los Servicios Meteorológicos mes a mes, actualmente se está utilizando 1991-2020 como periodo de referencia. Este periodo, de 30 años, se va actualizando cada 10 años. Sin embargo, en el contexto de cambio climático se utiliza un periodo de referencia distinto; el periodo denominado preindustrial 1850-1900. Este periodo se considera sin la influencia humana y sirve para comparar los valores actuales con ese clima "no alterado" por nosotros.
Estos distintos periodos de referencia, que dependen de lo que queramos observar, hacen que ciertos récords no sean comparables. Por ejemplo, que la temperatura actual supere los valores de temperatura preindustriales es "más fácil", porque la temperatura en ese periodo era significativamente más baja que ahora.
Y eso nos lleva a otra pregunta ¿qué tanta confianza tenemos en las observaciones?
La base de datos también importa
Medir la temperatura global del planeta no es tarea sencilla. Mucho menos lo es estimar la temperatura que había entre 1850 y 1900 para crear nuestro periodo de referencia.
Diversos grupos de investigadores alrededor del mundo se dedican a recopilar datos observados de estaciones meteorológicas y datos oceánicos, además de realizar todas las pruebas y correcciones estadísticas que sean necesarias, para crear las bases de datos que serán utilizadas en los cálculos de temperatura global.
Si bien las metodologías que se utilizan son similares, no son exactamente iguales. Esto lleva a ligeras diferencias en los valores de temperatura. Estas diferencias pequeñas en la estimación de la temperatura global actual son mucho mayores si nos vamos al periodo preindustrial. Algunas bases de datos de este estilo son HadCRUT5, NOAAGlobalTemp y Berkeley Earth.
Pero hay otro grupo de estimaciones: una realizada con modelos globales. Los mismos que se utilizan para el pronóstico, pero utilizados para recrear el pasado. Estas reconstrucciones, como JRA-55 o ERA5 son reconstrucciones y si bien permiten tener un valor de temperatura en todos los puntos de grilla del modelo (independiente si hay o no estaciones meteorológicas ahí) poseen errores inherentes a los modelos.
Por eso es que la comparación de valores récord obtenidos con reconstrucciones o con observaciones serán un tanto delicadas. Es muy importante conocer los datos que se utilizaron, principalmente en el periodo preindustrial.
Todas estas son algunas de las consideraciones que se deben tener en cuenta a la hora de mirar los récords de temperatura que se van rompiendo de manera cada vez más frecuente. Si bien la tendencia al calentamiento es inequívoca, los valores puntuales tendrán diferencias dependiendo de cómo se mida.