Taylor Swift y las Swifties baten nuevo récord sísmico y ayudan a la ciencia

Cualquiera que viva cerca de un gran estadio sabe que durante los eventos musicales el suelo tiembla. Pero lo que ocurrió en Los Ángeles el pasado agosto durante el Eras Tour de Taylor Swift superó todas las expectativas. Y como no hay mal que por bien no venga, los científicos aprovecharon los datos registrados por la red de sismógrafos para entender mejor estos movimientos.

Monica Kohler, destacada profesora e investigadora de ingeniería civil y mecánica en Caltech, lideró un equipo de científicos en respuesta al fenómeno. Para desentrañar el impacto del espectáculo de Swift el 4 de agosto, aprovecharon una sofisticada red regional de estaciones sísmicas. Recolectaron datos utilizando sensores permanentes que se extendían hasta unos 10 kilómetros del estadio.

Además, instalaron temporalmente 10 sensores sísmicos dentro del propio SoFi Estadium y uno más al otro lado de la calle. Estos sensores dentro del recinto eran acelerómetros económicos construidos e implementados por los investigadores, utilizando componentes de mercado para la Red Sísmica Comunitaria. Esta red distribuida cuenta con más de 1200 detectores de movimiento fuerte en California y proporciona una valiosa fuente de información para estudiar eventos sísmicos.

Los investigadores quedaron impresionados con los resultados. Durante el espectáculo, el estadio y sus alrededores realmente temblaron, pero de una manera distinta a la de un terremoto. Se observó un aumento claro en el movimiento del suelo, similar a un temblor armónico, que implica explosiones de energía en intervalos de frecuencia específicos durante períodos de tiempo más prolongados. Este tipo de actividad sísmica suele estar relacionada con la actividad volcánica, como el movimiento del magma bajo tierra.

Nuevos conocimientos sobre los sismos en recitales

Para analizar los datos, los investigadores utilizaron espectrogramas, gráficos que muestran la cantidad de energía medida en varias frecuencias de vibración a lo largo del tiempo. Al examinar las señales sísmicas de los espectrogramas, los científicos lograron identificar 43 de las 45 canciones que Swift interpretó en su concierto y calcularon la cantidad total de energía emitida por cada una.

Descubrieron que la canción que generó el mayor "temblor de concierto" fue "Shake It Off". Durante esa canción, la energía emitida equivalía a un terremoto de magnitud 0,85. "Pero hay que tener en cuenta que esto representa la cantidad total de energía durante toda la canción", aclara Tepp. "Si observamos la amplitud máxima, solo por un instante, fue más bien un evento de magnitud menor a 2".

Kohler destaca que los datos recopilados dentro del estadio fueron muy similares a los obtenidos por los sensores fuera del estadio, incluso en lugares tan distantes y concurridos como el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles. "La energía generada por los entusiastas del concierto de Taylor Swift hizo que el estadio vibrara en diferentes frecuencias", comenta. "Y esa energía se propagó a través del suelo hasta alcanzar todos estos otros lugares donde registramos vibraciones. Esto nos recuerda la importancia de comprender todas las distintas partes de este gran sistema interconectado".

¿Qué genera los movimientos del suelo?

Los datos revelaron que el movimiento, más que la música, se alinea mejor con las formas de onda. Para confirmar esto, Tepp, también bajista, realizó un sencillo experimento. Colocó un sistema de megafonía cerca de uno de los acelerómetros y puso a todo volumen la canción "Love Story" de Swift.

Cerca del final, empezó a saltar al ritmo. Fue solo entonces cuando el sensor sísmico registró señales armónicas. Tepp también probó tocando su bajo al ritmo de la misma canción, pero no obtuvo la misma señal armónica, a pesar de que, según ella misma, "los ritmos del bajo probablemente estaban más en sincronía con el ritmo que mis saltos".

Kohler señala que durante las emergencias, los estadios y otras grandes estructuras, como los centros de conferencias, se utilizan como refugios de emergencia. "En esos casos, sería realmente importante poder monitorear los movimientos de estas estructuras antes, durante y después de un evento a gran escala como un terremoto para determinar si la estructura sigue siendo segura, confiable y sólida", dice.

Tepp destaca que el estudio también sirve como un recordatorio útil de que los terremotos no son el único tipo de actividad sísmica que los sismólogos deben analizar. "Hemos diseñado todas nuestras escalas de magnitud basadas en terremotos, pero ¿qué pasa cuando la señal no parece un terremoto? ¿Cómo se caracteriza su fuerza?" pregunta.

Récord en Seattle

Durante 12 años, el evento más emocionante en el noroeste del Pacífico fue el "Terremoto de la Bestia", causado por la espectacular carrera de Marshawn Lynch durante un juego de los Seattle Seahawks en el estadio Lumen Field. Este fenómeno, registrado por una estación sísmica llamada KDK, marcó un hito en la historia deportiva de la región. Aunque se han comparado otros eventos en el estadio, ninguno ha logrado igualar la notoriedad del "Terremoto de la Bestia".

En 2023, durante su gira 'Eras Tour', Taylor Swift realizó dos conciertos con entradas agotadas en el mismo estadio. La asistencia masiva de más de 70.000 fans cada noche y la música a todo volumen generaron una actividad sísmica registrada por la estación KDK. Jackie Caplan-Auerbach, de la Universidad Western Washington, comparó los datos del "Terremoto de la Bestia" con los generados por Swift y sus seguidores, y obtuvo resultados sorprendentes.

El "Terremoto de la Bestia" tuvo una duración aproximada de 2 minutos, con el temblor más intenso registrado en un lapso de unos 40 segundos después del momento crucial. Jackie comparó los datos sísmicos del evento de 2011 con aproximadamente 4 minutos de datos de la segunda noche del concierto de Taylor Swift. Sorprendentemente, el suelo tembló más durante el concierto que durante el partido de los Seahawks. Es importante señalar que ninguno de estos eventos "causó" un terremoto y cualquier magnitud atribuida es solo una estimación aproximada.

Referencia de la noticia:

Gabrielle Tepp, Igor Stubailo, Monica Kohler, Richard Guy, Yousef Bozorgnia; Shake to the Beat: Exploring the Seismic Signals and Stadium Response of Concerts and Music Fans. Seismological Research Letters 2024; doi: https://doi.org/10.1785/0220230385

https://pnsn.org/blog/2023/08/15/beast-quake-taylor-s-version-from-the-vault