Tecnología para captura de carbono genera controversia en Reino Unido
Por un lado, los expertos avalan la tecnología para capturar y almacenar el carbono. Pero, en la otra vereda, los activistas apoyan la construcción de nuevas plantas de energía renovable. Descubre los detalles en el siguiente artículo.
El debate está en su punto máximo y las decisiones se deben tomar pronto, ya que el tiempo avanza y hay objetivos que cumplir de aquí al año 2030. En el Reino Unido, tanto los geólogos como los ingenieros han criticado a los grupos ecologistas. Estos últimos afirman que la captura y almacenamiento de carbono, para reducir las emisiones, son errores costosos. Pero primero, comprendamos un poco más el tema.
¿En qué consiste la captura, uso y almacenamiento de carbono?
Se refiere a una cadena de diferentes tecnologías. Ellas, pueden evitar que el dióxido de carbono, producido por las principales fábricas y centrales eléctricas, llegue a la atmósfera. De esa manera, se contribuye a un escenario de calentamiento global menos preocupante.
Lo primero que se requiere es equipar las chimeneas de las fábricas con filtros especiales de solventes, capaces de atrapar las emisiones antes de que se escapen a la atmósfera. Luego, ese gas se canaliza a lugares donde se puede usar o almacenar. La mayor parte del dióxido de carbono se inyectaría a gran profundidad para ser almacenado donde pueda contribuir a la crisis climática. Otra manera, es utilizarlo para ayudar a cultivar plantas o en la fabricación de bebidas carbonatadas.
La controversia que se ha provocado
De acuerdo a expertos de la Universidad de Edimburgo, la captura y almacenamiento de carbono será la única forma eficaz, y a corto plazo, que evitaría que la industria del acero, la fabricación de cemento y varios procesos más, sigan vertiendo emisiones a la atmósfera. En los últimos 20 años se han propuestos diversos programas para este fin, pero se han visto cancelados debido a que los gobiernos vacilaron para su financiamiento.
No obstante, el Primer Ministro Boris Johnson, se ha comprometido a aportar 1.000 millones de libras esterlinas desde los fondos públicos como parte de su plan para una "Revolución Industrial Verde". Esto va de la mano con el objetivo de convertir a Reino Unido en un líder mundial en la tecnología propuesta y, además, crear miles de puestos de trabajo.
Por otra parte, los activistas de Global Witness y Friends of the Earth Scotland dijeron hace unos días que depender de la captura y almacenamiento del carbono no es una forma confiable de descarbonizar el sistema energético actual. Ello lo hicieron mediante una publicación donde, aseguran, que esta tecnología tiene un historial de promesas excesivas. Sin embargo, sugieren e instan a que se dé prioridad a la construcción de más plantas de energía renovable.
Finalmente, la gran mayoría de los éxitos actuales en la reducción de las emisiones de carbono del Reino Unido provienen de la industria de la energía. Aquí, las fuentes de energía renovables se han hecho cargo de la generación de electricidad a partir de plantas de carbón, gas y petróleo.