Tormenta solar y auroras polares: ¿afectan el tiempo meteorológico en la Tierra?

La actividad del Sol mantiene alertas a los seres humanos que, con estos episodios, calibran que somos una mera pelusa en medio de la inmensidad del universo. Por lo mismo surgen tantas interrogantes como, por ejemplo, la incidencia de este evento en el cambio climático.

aurora
Varias zonas de Chile tuvieron la oportunidad de observar las auroras polares durante el fin de semana, tras la intensa actividad geomagnética solar.

“El aleteo de una mariposa en Sri Lanka puede provocar un huracán en Estados Unidos. Esto versa parte del efecto mariposa en una metáfora que busca graficar que las pequeñas variaciones, por muy insignificantes que parezcan, con el tiempo pueden generar cambios enormes.

Por lo mismo, ante un evento tan magnífico como la tormenta solar que se produjo hace algunos días, cabe de inmediato la pregunta ¿cómo afectará el estado del tiempo meteorológico un fenómeno tan potente?

Las tormentas solares intensas pueden afectar la concentración de ciertos gases en la parte alta de la atmósfera polar”, reconoce, Raúl Cordero, climatólogo de la Universidad de Santiago (Usach).

Tanto así que “en el pasado hemos visto caídas de hasta 15% en la concentración de ozono estratosférico sobre la Antártica como resultado de la actividad solar intensa”, resalta. Y luego agrega, “sin embargo, estas anomalías tienen más interés científico que práctico”.

Tormentas solares y el tiempo meteorológico

El ozono (O3) estratosférico está directamente relacionado con la protección ante la radiación ultravioleta proveniente del Sol. Un punto muy relevante, por ejemplo, considerando el agujero en la capa de ozono que se genera durante el segundo semestre del año sobre la Antártica.

Lo anterior en la estratósfera. Recordemos que la atmósfera cuenta con 5 capas principales que protegen la Tierra y permiten en ella la vida tal como la conocemos. Estas, en orden ascendente, son: tropósfera, estratósfera, mesósfera, ionósfera o termósfera y exósfera.

Los satélites y estaciones espaciales se ubican en las 2 últimas capas de la atmósfera, es decir, en la ionósfera y la exósfera, por eso se habla de potencial afectación en las comunicaciones. Lo mismo ocurre con las auroras polares.

En cambio, las variables de meteorológicas se producen en la capa de la atmósfera más cercana a la superficie, es decir, la tropósfera. Por lo tanto, las tormentas solares “no tienen ninguna influencia relevante en el tiempo atmosférico”, sentencia Raúl Cordero.

¿Y el cambio climático?

El Sol permite y regula la vida en la Tierra, pero estas tormentas “no tienen ninguna consecuencia relevante sobre el clima o la meteorología en latitudes en las que vive la población global”, reitera el climatólogo de la Usach.

Sin embargo, advierte Cordero, sí puede tener alguna incidencia como que “afecte algún satélite de los que usamos para monitorear el clima y el tiempo meteorológico”.

Al descartar que la tormenta solar afecte el tiempo atmosférico en la Tierra, o sea, es cosa de sentir como el frío continúa marcando el mayo más helado del que se tengan registros en la zona central de Chile, surge otra interrogante.

Esta manifestación excepcional del Sol ¿incide en el calentamiento sostenido y acelerado de la temperatura, tanto del aire como del océano, en el planeta? Raúl Cordero es enfático al responder que esto tiene “ningún efecto. Nada".