La Niña ayudará para un noviembre más seco y caluroso en Chile

En octubre, primer mes primaveral del año, se acentuó la presencia de la Niña y se dieron los esperados aumentos de temperatura a lo largo del país, siendo el impacto de olas de calor un importante indicador. En Antofagasta se reportaron 4 olas a lo largo del mes. Durante la primera quincena, se dio una en Santiago, con la que casi se alcanza el récord de las 13 olas de calor de 2019. En el sur del país, en la Araucanía, hay registro de 2 olas: una en la primera quincena y otra a finales de octubre.

Las precipitaciones continúan abajo del promedio climatológico, sobre todo, en el sur del país. Las estaciones meteorológicas comprendidas entre las regiones de La Araucanía y Los Lagos han registrado un déficit que oscila entre un 8 y 28%, siendo el más bajo en Osorno y el más alto déficit en Punta Arenas.

¿Se esperan precipitaciones?

Para este mes, La Niña viene decidida y con mayor intensidad que el pasado. En efecto, existe un 85% de probabilidad que persista durante el verano austral 2020-21 y con un 60% hasta el otoño. Se continuará prolongando la megasequía, dando anomalías de precipitación más significativas para el Sur.

La Oscilación Antártica (AAO) se encuentra en fase positiva, lo cual indica que el cinturón de bajas presiones está desplazado hacia la Antártida, es decir, alejado del sur de Chile. Esto conlleva a una gran influencia por parte del anticiclón del Pacífico Sur durante el mes de noviembre que traerá consigo una fuerte disminución de precipitaciones. Los modelos CFSv2 y GEM-NEMO muestran una gran probabilidad de ocurrencia en las regiones de Los Lagos y Aysén.

En el altiplano, los modelos apuntan a un normal comportamiento de las aguas caídas.

Tendencia de temperaturas para el mes

Según los modelos probabilísticos de predicción climática, las temperaturas continuarán su ascenso durante este mes en el país. En particular, el modelo GEM-NEMO presenta una anomalía positiva significativa para las regiones de Los Lagos y Aysén.

A pesar de persistir la amplitud térmica - por las diferencias de temperatura entre las heladas de las mañanas y el calor de las tardes - se tendrán variaciones en las máximas y mínimas por el aumento de ambos márgenes de temperatura.

Se aproxima la temporada de deshielos en la cordillera de los Andes, y aunque no ha llegado al peak, ya se han presentado algunos deshielos durante el pasado mes de octubre. La tendencia hacia temperaturas más altas durante este noviembre no dejan un panorama muy alentador, más aún considerando que está por venir un verano 2020 con una La Niña probablemente muy intensa.

2020 está a punto de confirmarse más un año de la megasequía; y en noviembre las precipitaciones se concentrarán en el sur de Chile, aunque con un alto déficit, al que se suma un ascenso considerable de las temperaturas.